Un padre encerró y dio de comer comida para perros a su hijo autista en Argentina

Como si se tratara de una película de terror, la vida de la familia Oviedo es escalofriante. Su padre, Eduardo, un hombre de 65 añospresuntamente mantuvo encerrados en una jaula durante varios años a su hijo autista y a su esposa con problemas psicológicos en su vivienda en Mar del Plata.

Los hechos ocurrieron en un barrio residencial a 400 kilómetros al sudeste de Buenos Aires. La jaula era de construcción manual y presentaba barrotes de hierros, colchones viejos, ladrillos y escombros, y en ella se encontró comida para animales que no se descarta fuera suministrada a las víctimas del suceso, según explicó el fiscal Alejandro Pellegrinelli.Allí Oviedo mantenía encerrado durante el día a su hijo autista de 32 años y a su esposa de 61 años, que padece graves y visibles problemas psiquiátricos, en medio de la suciedad y en situación de total abandono.

Una nuera del detenido afirmó al diario local "La Capital MDP" que Oviedo obligaba a su hijo autista a aspirar gasolina para calmarlo y que lo había convertido a adicto a esta sustancia, una versión que la fiscalía estudia pero aún no puede confirmar. Venía "con un hacha o una maza cuando le pedíamos que los bañara porque no los podía tener así", declaró al diario.

Dos de los hijos de Oviedo presentaron una denuncia ante la Comisaría de la Mujer de Mar del Plata. Los otros tres hijos del hombre viven en las inmediaciones de la casa donde se encontraba la jaula y conocían la situación, pero no se pronunciaron antes debido al miedo a las amenazas y el carácter violento de su padre.

Oviedo, que fue arrestado el viernes, se acogió el pasado sábado a su derecho de no declarar en la causa abierta contra él.