OPINION

Podría ser de Apple: el gato que levanta tu coche con sólo pulsar un botón

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Remi van Oers, un estudiante de la Academia de Diseño de Eindhoven, las ha debido de pasar canutas en algún cambio de neumático, como prácticamente cualquier conductor. No es de extrañar; los gatos actuales tienen más pinta de aparato de tortura medieval que de instrumento sencillo e intuitivo destinado a arreglarnos el desaguisado vial.

Se trata de mecanismos innecesariamente complicados que no todo el mundo sabe cómo manejar y que requieren una gran cantidad de esfuerzo físico por parte del usuario. A este estudiante de diseño se le ocurrió una ingeniosa solución para dar la vuelta al concepto y adaptarlo absolutamente a todos los conductores: un gato de auto-inflado que se parece menos a una herramienta mecánica y más a un nuevo dispositivo de Apple.

El Easy-Car-Jack tiene un pequeño orificio en su carcasa que aspira el aire para inflar un globo de acordeón, fabricado en poliéster recubierto de PVC. El globo se infla casi de inmediato, apuntalando vehículos pesados de hasta 1,3 toneladas, aproximadamente, el tamaño de un coche medio europeo o de un coche americano pequeño. Todo lo que hay que hacer es apretar el botón.

La tapa del gato esconde la batería de carga del inflador y el triángulo de señalización, que puede ser colocado en las cercanías y que también resplandece con iluminación LED para dar mayor seguridad al conductor con problemas.

Con Easy-Car-Jack ya no se necesitará ningún conocimiento técnico para elevar el coche y arreglar un pinchazo (aunque sacar la rueda sea otra historia). Y también se ejecutará la maniobra con mayor seguridad, pues si el globo se pincha se deshinchará progresivamente, al contrario que los sistemas mecánicos, más dados a sorprendernos repentinamente con la cabeza en los bajos.

Van Oers dio a conocer su Easy-Car-Jack en el show de graduación de la Academia de Diseño de la semana pasada.

Posibilidades de comercialización: 75%; Por las fotos parece que funciona, aunque habría que estudiar la estabilidad del coche con viento racheado o en terrenos irregulares. Un diseño que habla por sí mismo...pero que habrá que testar ampliamente antes de verlo en el maletero.

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