El galgo de respiración y el cordero de diálisis, animales médicos para un futuro más saludable

Revital Cohen es una diseñadora inglesa que tiene bien claro, por lo menos en su trabajo artístico, que el futuro de nuestra salud pasa por incorporar a los animales domésticos a la fuerza mecánica y laboral de nuestra sanidad.

Su propuesta, llamada “Life Support”, consiste en una simbiosis natural (o antinatural, según se mire) para convertir los animales más cercanos a nosotros en aparatos mecánicos sanitarios, para mejorar la calidad de vida de la gente con problemas renales y pulmonares.

¿Podrían los animales transgénicos convertirse en un mecanismo de vida y no, simplemente, en suministro de las piezas u órganos? ¿Podría el ser humano convertirse en parásito que vive de las funciones corporales de otro organismo?

Revital, haciendo honor a su nombre, piensa que sí.

“Life Support” es cuando menos un original plan para usar los galgos que se han retirado de la carrera como una ayuda a la ventilación de los seres humanos con problemas respiratorios. El perro reemplaza al ventilador mecánico convencional mediante una bomba adaptada que captura la presión del pecho vacilante del animal, para bombear aire a los pulmones del paciente de forma no invasiva.

Para ello, el galgo jubilado anda sobre una cinta sin fin, siempre con la mirada fija en un conejo de peluche que lo mantiene ocupado en el invierno de su existencia; mientras tanto también se mantiene vivo, gracia al fuelle de su pecho, el paciente al que estará conectado.

Curiosamente, Revital Cohen también propone un prototipo de máquina de diálisis para el ganado ovino, que algún día podría actuar como una máquina renal natural para los seres humanos.

Tras obtener un poco de tejido de la médula ósea del paciente se aísla su ADN y las zonas que se ocupan de la producción de sangre y de la respuesta inmune. Posteriormente se inserta este ADN en el genoma de la oveja, que dará a luz un corderillo que en vez de ser lechal, será vampiro, pues se nutrirá de nuestra sangre para filtrarla y eliminar sus toxinas. Preferiblemente mientras el paciente y la oveja duermen.

¿Cómo se les queda el cuerpo? Pues, posiblemente, como a Brigitte Bardot después de ver a un burro-taxi de Mijas subiendo un grupo de norteamericanos. Pero no teman ni manden todavía a las fuerzas de la PETA que lo de Revital es una cosa artística y la finalidad no es otra que mostrar nuevos caminos que, igual algún día, podrían convertirse en anchas avenidas para el bienestar humano.

Más info: Revital y sus cosas