Partido exgobernante marfileño boicoteará las elecciones regionales de abril

  • El Frente Popular Marfileño (FPI, antiguo partido en el poder en Costa de Marfil) boicoteará las elecciones regionales del 21 de abril, anunció hoy su secretario general interino y portavoz, Richard Kodjo.

Abiyán, 21 mar.- El Frente Popular Marfileño (FPI, antiguo partido en el poder en Costa de Marfil) boicoteará las elecciones regionales del 21 de abril, anunció hoy su secretario general interino y portavoz, Richard Kodjo.

"Ningún militante del FPI debe, de ninguna manera, formar parte de estas elecciones. Es decir: no debe figurar en lista alguna, no debe hacer campaña, aún menos votar, so pena de sanciones disciplinarias previstas por nuestros estatutos", declaró Kodjo en rueda de prensa.

Subrayó que su partido no reconocerá los resultados de lo que tildó de "mascarada electoral".

En este sentido, el partido liderado por el expresidente Laurent Gbagbo, actualmente detenido por la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes contra la humanidad, amenaza con denunciar a la Comisión Electoral Independiente (CEI) por incompetencia.

El FPI considera que la CEI debería haberse renovado tras los comicios legislativos de 2011.

Kodjo exigió también una mayor garantía de seguridad del proceso electoral para que los partidos opositores puedan desarrollar una campaña tranquila.

Su decisión de boicotear los comicios regionales se produce tras unas fallidas negociaciones con el Gobierno que preside Alassane Ouattara.

Estas conversaciones se atascaron en temas como la exigencia, por parte del FPI, de una ley de amnistía para los antiguos dirigentes del anterior Gobierno y la liberación de Gbagbo y los demás responsables del Frente Popular Marfileño detenidos en diferentes prisiones del país.

Costa de Marfil está sumida en un complicado proceso de reconciliación nacional, tras la violencia desencadenada tras las elecciones del 28 de noviembre de 2010.

En esos comicios, Gbagbo no reconoció su derrota pese a que Ouattara fue declarado vencedor, lo que desató una cruenta crisis de cinco meses que enfrentó a fuerzas leales a uno y otro político.

Al menos 3.000 personas murieron, otras 32 están desaparecidas y 500 fueron detenidas de forma arbitraria en actos de violencia posteriores a los comicios, según la Fiscalía de la CPI.

Tras ser detenido el 11 de abril de 2011, Gbagbo fue trasladado el 29 de noviembre de ese mismo año a la CPI, que le imputa cuatro cargos de lesa humanidad, entre ellos violaciones, asesinatos y persecuciones dirigidas contra partidarios de Ouattara.

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