En su comunicado, Mogherini ha destacado que la detención de Sokha supone "una violación de su inmunidad parlamentaria", afirmando que implica además "una peligrosa escalada política".
"Junto a las recientes acciones de las autoridades contra ONG y ciertos medios de comunicaciones, este arresto sugiere un mayor esfuerzo para restringir el espacio democrático en Camboya y el espacio para la información, comentario y crítica independiente", ha señalado.
Por ello, ha destacado que "un proceso democrático creíble de cara a las elecciones parlamentarias de julio de 2018 requiere un ambiente en el que los partidos políticos, la sociedad civil y los medios puedan llevar a cabo sus papeles legítimos sin miedo, amenazas o restricciones arbitrarias".
"La UE está dispuesta a continuar ayudando a Camboya. Esperamos que las autoridades respeten el derecho al debido proceso de todos los camboyanos y organizaciones que operan en Camboya", ha remachado.
La detención de Sokha tuvo lugar poco después de que las autoridades publicaran un vídeo que demostraría que Sokha estaría conspirando para derrocar al primer ministro, Hun Sen, con ayuda de Estados Unidos, según Phnom Penh.
El vídeo, publicado en la página oficial del Gobierno en Facebook, fue grabado en Australia por la televisión privada camboyana CBN. En la grabación, Sokha se dirige a un grupo de seguidores en idioma jemer y les explica una posible estrategia política coordinada con Estados Unidos, aunque sin mencionar un derrocamiento inmediato del Gobierno.
Durante la jornada del domingo, el diario camboyano 'The Cambodia Daily', uno de los pocos medios independientes del país, anunció que cerrará este lunes debido a que el Gobierno le ha ordenado pagar seis millones de dólares (unos cinco millones de euros) en concepto de impuestos.
"El poder para imponer impuestos es el poder de destruir. Tras 24 años y 15 días, el Gobierno camboyano ha destruido 'The Cambodia Daily', una parte especial y singular de la prensa libre en Camboya", indicó en su comunicado.
La tensión en el país del sureste asiático va en aumento de cara a las elecciones generales del próximo año, en las que se espera que el partido de la oposición pueda hacer frente a Sen, en el Gobierno desde hace más de tres décadas.
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