Reina Isabel ofrece sin su marido una fiesta a 3.500 invitados en Sandringham

Londres, 12 jun.- La reina Isabel II de Inglaterra celebró hoy una fiesta con 3.500 invitados en el jardín de su residencia de Sandringham (condado de Norfolk) a la que no asistió su marido, el duque de Edimburgo, convaleciente tras su reciente hospitalización.

El príncipe Felipe, que abandonó el hospital londinense King Edward VII el sábado tras permanecer seis días ingresado por una infección de vejiga, fue el gran ausente de esta celebración por el Jubileo de Diamantes de su esposa, que estuvo acompañada por su hijo Andrés.

La reina llegó a la residencia, donde la esperaban alrededor de 3.500 invitados de la zona, vestida con un sombrero y un abrigo de color albaricoque.

La fiesta, la primera organizada por Isabel II en su residencia real de Sandrigham desde 2002, cuando realizó un evento similar con motivo de su Jubileo de Oro, estuvo amenizada por la música de orquestas locales.

Además, los invitados pudieron degustar tartas de chocolate, dulces y bollos elaborados por un grupo de estudiantes universitarios de la zona.

Durante la celebración, la soberana aprovechó la ocasión para agradecer a algunos ciudadanos de los condados de Norfolk y Suffolk su contribución para mejorar el bienestar en sus comunidades.

La reina proseguirá su agenda mañana con un viaje de dos días a Midlands (en el centro del país) al que tampoco asistirá el duque de Edimburgo y que forma parte de su gira por distintos puntos del Reino Unido por sus 60 años en el trono.

El príncipe Felipe tuvo que ser hospitalizado el pasado lunes 4 tras haber participado en el desfile fluvial de mil barcos en el río Támesis el día anterior con motivo del Jubileo de Diamantes.

Tras perderse la mayoría de los espectaculares actos previstos por el aniversario en el trono de su esposa, Felipe abandonó el hospital el pasado sábado, un día antes de cumplir 91 años, aunque sigue convaleciente.