ONG especialistas en el CIE de Aluche claman en apoyo a los internos: "Están encerrados sin cometer ningún delito"

Estas organizaciones llevan cerca de una década realizando visitas diarias a este CIE para dar asesoramiento y apoyo a las personas que durante un máximo de 60 días se encuentran encerradas, esperando a que se aclare su situación. Así, han reiterado sus reivindicaciones de poner fin a este y a otros centros de internamiento y, mientras esto se produce, han solicitado mejorar la situación en la que viven los inmigrantes durante este internamiento.

En este sentido, la activista de la asociación Karibu, Carmen Echevarría, ha criticado, en declaraciones a Europa Press, que "se pueda privar de libertad a una persona por una falta administrativa" y ha señalado que "no es justo que a alguien, por perder su trabajo, le quiten la residencia y le puedan expulsar, a pesar de que lleven mucho tiempo en el país".

"Llegan a Madrid, a un centro que, aunque no sea penitenciario, tiene toda la pinta, y pueden ser expulsados en cualquier momento, dejando aquí a su familia, su posible trabajo, por precario que sea, y devolviéndoles a un país del que algunos han salido hace 10 o 15 años", ha explicado Echevarría.

'NO NOS HAN DEJADO ENTRAR EN EL CIE'

La voluntaria de Karibu ha señalado que a lo sucedido en el CIE de Aluche "no se puede llamar motín, ya que no ha habido ni forcejeo, ni heridos, ni altercados". "Hemos intentado entrar en el CIE pero no nos han dejado por motivos de seguridad, aunque, conociendo las situaciones en las que están allí, puedo comprender la protesta --ha declarado Echevarría--. No tienen nada que hacer en el CIE, no tienen actividades, convive gente mezclada de distinta nacionalidad y condición. Para tres meses, les dan un chandal, calzoncillos y unas deportivas, con el frío del invierno en Madrid".

Así, la activista ha abogado por mejorar el internamiento de los CIE, aunque ha solicitado "ir más al fondo de la cuestión, ya que se trata de algo muy serio privar de libertad a una persona". "Esto remite más arriba, en la ley de Extranjería, y más que conseguir que el CIE sea un hotel de cinco estrellas, hay que darle muchas vueltas a la ley, y humanizarnos un poco, porque oyes sus historias y hasta que no se les escucha en persona y les das un abrazo, no te das cuenta de lo que está pasando".

Por su parte, el abogado Santiago Yerga, de la ONG jesuita Pueblos Unidos, ha asegurado a Europa Press que lo sucedido en el CIE de Aluche es "la consecuencia lógica y directa de la configuración de estos centros y del sistema en sí de los CIE como instrumento de lucha contra la inmigración irregular". Así, ha indicado que "el internamiento es una medida especialmente onerosa por la privación de libertad y otros derechos y las consecuencias son estos intentos de huida".

Yerga ha recordado que se trata de "personas cuya única infracción es no tener papeles y, en consecuencia, una única sanción administrativa". "La administración española debería ser valiente, imaginativa y tener generosidad para explorar otras vías alternativas", ha apuntado el abogado, al tiempo que ha recordado que en el año pasado, "el 59% no fue expulsado; unas cifras demoledoras que ponen de manifiesto la crisis de internamiento como instrumento para la lucha de la inmigración irregular".

PROTESTA 'ABSOLUTAMENTE LEGÍTIMA'

Respecto a la protesta en el CIE madrileño, Yerga ha subrayado que es "absolutamente legitimo que personas que hayan iniciado un proyecto migratorio de tan gran envergadura, quieran intentar desarrollarlo desde una expectativa de libertad y no a través del punto de vista del fracaso que supondría la repatriación a su país de origen". "El valor de la libertad debe imperar por encima de todas las cosas", ha sentenciado.

En la misma línea, la portavoz de la Campaña Estatal por el Cierre de los CIE, Dayana Contreras, ha afirmado que los internos buscaban "reivindicar su dignidad como personas, así como las condiciones que se encuentran dentro del centro". "Hay que dar voz a estas personas que están pasando por esto. Se trata de una manifestación pacifica y no hay que sacarlo de contexto diciendo que es un motín".

Por último, ha mostrado su "preocupación por lo que pueden pasar con estas personas, porque no se sabe nada después de bajar del tejado y si a esas personas las deportan, esto quedará en historia y nunca se va a tener acceso a saber qué pasó".