'La letra, con sangre entra'. Eso ha debido pensar Kirill Bartashevitch, un padre de Minnesota que no dudó en encañonar a su propia hija con un rifle de asalto AK-47 durante una tensa discusión sobre las notas. Bartashevitch, de 52 años, montó en cólera cuando su hija apareció con dos notables, en lugar de todo sobresalientes.
La niña, de 15 años, se enfrentó a su padre. Ambos se insultaron pero lo que más enfureció a este estricto cabeza de familia es que su hija le dijese que le odiaba, según ha explicado la televisión local WCCO.
En ese momento, Bartashevitch cogió la ametralladora que acababa de comprar en previsión del inminente endurecimiento de los requisitos para poseer armas de fuego promovido por la administración Obama y apuntó a la menor. Alarmada por los gritos, la madre de la niña se interpuso y consiguió que bajara el arma.
Ambas denunciaron el incidente a las autoridades y la policía detuvo al agresor. Bartashevitch, acusado de proferir amenazas terroristas, se encuentra en prisión provisional bajo fianza de 20.000 dólares y se enfrenta a una pena de hasta cinco años de cárcel, además de una multa de un mínimo de 10.000 dólares.
Bartashevitch adquirió la AK-47 sólo dos días antes del incidente junto a una gran cantidad de munición. Además, tras registrar su casa, la policía encontró una pistola y balas del calibre 9 milímetros.
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