Fracasa el intento japonés de poner en marcha un recolector de basura espacial

  • Se trataba de una soga que tenía que balancearse en el campo magnético terrestre, generando electricidad y frena el movimiento de los deshechos.

    Se calcula que en estos momentos por el espacio hay cerca de 18.000 toneladas de basura espacial. 

Fracasa el intento japonés de poner en marcha un recolector de basura espacial
Fracasa el intento japonés de poner en marcha un recolector de basura espacial
A. Domingo

Es espacio está lleno de basura. Según los datos facilitados por la NASA a principio de año, cerca de 18.000 toneladas de escombros flotan y vagan sin rumbo por el espacio. Son restos de cohetes, de satélites y de explosiones que quedan ahí, con el consiguiente riesgo de que provoquen un accidente o caigan a la tierra. 

Esta basura supone un serio riesgo y por eso Japón se propuso recogerla. Para ello fabricó un recolector de basura espacial. En la nave con suministros que Japón lanzó a la Estación Espacial Internacional en diciembre incluyó una especie de soga de 700 metros que tenía que desplegarse y desplazar los desechos.

La soga recoge la basura y la lleva hacía órbitas cercanas a la Tierra con el objetivo de que acaben entrando en su atmósfera y desitengrándose. El cable, llamado electrodinámico, está hecho con filamentos de acero y de aluminio y fue diseñado con la ayuda de un fabricante de redes de pesca.

Este lunes se ha sabido que el experimento no ha funcionado y la basura espacial sigue campando a sus anchas. 

"Creemos que la soga no se desplegó", dijo a la prensa este lunes el investigador Koichi Inoue, responsable del proyecto. "Naturalmente es una decepción terminar la misión sin alcanzar sus principales objetivos", añadió.Crear un campo magnético terrestre

El funcionamiento de la soga era sencillo. Cuando se balancea en el campo magnético terrestre, el cable genera electricidad y frena el movimiento de los deshechos, que luego empezarán a bajar progresivamente hasta entrar en la atmósfera y quemarse sin llegar a la superficie de la Tierra, según las previsiones de los científicos. 

La agencia espacial japonesa ha trabajado diez años con la empresa Nitto Seimo para desarrollar este sistema. "La soga utiliza nuestra técnica de trenzado de redes pero fue muy difícil entrelazar elementos tan delgados", explicó Katsuya Suzuki, un ingeniero de la compañía.

El cable electrodinámico está fabricado con filamentos de acero y de aluminio y fue diseñado con la ayuda de un fabricante de redes de pesca.Otros fracasos de la industria aeroespacial japonesa

Esta misión debía ser una prueba para construir una soga mucho más larga (de entre entre 5.000 y 10.000 metros) para limpiar más eficazmente el espacio cercano. 

El año pasado, la agencia espacial japonesa ya tuvo que abandonar su satélite Astro/Hitomi que de golpe dejó de transmitir información.

Hace poco tuvo otro fracaso cuando intentó lanzar un pequeño cohete experimental al espacio, pero poco después dejó de comunicarse con la Tierra y hubo que abandonar la misión.

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