No pintar los botes de Coca-Cola podría salvar la tierra o, al menos, ayudaría a ahorrar energía y reducir la contaminación atmosférica y del agua. Según publica Gizmodo, el número de latas de Coca-Cola clásica vendidas cada año en todo el mundo supera los 75.000 millones. Cada una es pintada y también tratada con una gran cantidad de productos químicos que afectan al proceso de reciclado.
Según esta página web, si Coca-Cola decidiera lanzar al mercado sus latas sin puntura, eso ayudaría a reducir la contaminación del aire y del agua producidas durante el proceso de coloración de cada recipiente. Además, la energía y el esfuerzo malgastados para separar la pintura de cada lata en el proceso de reciclado también se ahorrarían.
La solución que ofrece Gizmodo es el posible acuerdo de todos los fabricantes para serigrafiar con una prensa la marca de cada compañía sobre el recipiente y dejar de utilizar pintura tóxica.
No es ninguna tontería. Según los datos utilizados por Gizmodo, Coca-Cola vende más de 67 millones de latas al día de su bebida clásica (más de 24.000 millones al año). A esta cifra habría que añadirle los 35 millones de recipientes vendidos entre Coca-Cola Light y Coca-Cola Zero.
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