La población de peces en aguas profundas es 10 veces mayor de lo que se creía

  • Investigadores de la Universidad de Cádiz han asegurado en un estudio publicado en la revista Nature Communications que el número de peces mesopelágicos, los que se encuentran entre los 200 y los 1.000 metros de profundidad en el océano, es diez veces más alta de lo que se estimaba.

Cádiz, 7 feb.- Investigadores de la Universidad de Cádiz han asegurado en un estudio publicado en la revista Nature Communications que el número de peces mesopelágicos, los que se encuentran entre los 200 y los 1.000 metros de profundidad en el océano, es diez veces más alta de lo que se estimaba.

Un equipo multinacional, liderado por Xabier Irigoien y del que forman parte los profesores Fidel Echevarría y Juan Ignacio González-Gordillo, del departamento de Biología de la UCA, ha llegado a esta conclusión a partir de las observaciones acústicas realizadas en la expedición Malaspina 2010 combinadas con un modelo trófico.

El estudio ha implicado a científicos de las Universidades de Cádiz, Oviedo y Las Palmas de Gran Canaria junto a grupos procedentes de Arabia Saudí, Australia y Noruega.

Los peces mesopelágicos pasan el día en la zona de penumbra del océano y suben a alimentarse a la superficie durante la noche, en lo que se puede considerar la mayor migración animal del planeta.

Forman una parte importante de la alimentación de los túnidos, como el atún o el bonito, pero al no ser pescados comercialmente siguen siendo unos grandes desconocidos.

Al alimentarse en superficie y migrar diariamente a profundidades de más de 500 metros, los peces mesopelágicos aceleran el transporte de CO2 al fondo del océano y contribuyen a aumentar el consumo de oxígeno en aguas profundas.

Hasta hoy se estimaba que la reserva total de peces en el planeta estaba alrededor en las 2.000 millones de toneladas y de ellas, aproximadamente la mitad serían peces mesopelágicos aunque ahora se ha descubierto que estas estimaciones deben ser aumentadas.

La expedición Malaspina es un proyecto que llevó a dar la vuelta al mundo a 400 investigadores en el que estaban implicados 27 grupos de investigación del CSIC, el Instituto Español de Oceanografía, 16 universidades españolas, el centro tecnológico AZTI-Tecnalia y la Armada Española y cuyo presupuesto ha rondado los 6 millones de euros.

Mostrar comentarios