Shanghái (China), 31 ene.- La mayor fabricante mundial de automóviles, la japonesa Toyota, retirará del mercado chino 22.869 vehículos de su marca de alta gama Lexus IS por tener sus limpiaparabrisas defectuosos.
Se trata de la primera gran retirada de automóviles en China tras entrar en vigor el pasado día 1 normas de control más estrictas.
La nueva normativa permite a las autoridades chinas multar e investigar a los fabricantes de automóviles en China que en caso de detectarse defectos en sus vehículos no los retiren del mercado para corregir el problema con la rapidez necesaria, recoge hoy el diario oficial Shanghai Daily.
Con todo, la retirada anunciada ahora forma parte de los 1,3 millones de vehículos que Toyota dijo ayer que retirará de todo el mundo (1,1 millones sólo en Estados Unidos) para corregir problemas en los airbag de sus modelos Corolla y en los limpiaparabrisas de sus Lexus IS.
Los modelos Lexus incluidos en la revisión podrían sufrir la detención de sus limpiaparabrisas en caso de verse bloqueados por algún tipo de resistencia, como podría ocurrir bajo una fuerte nevada.
Un portavoz de Toyota reconoció ayer que el problema detectado en los airbag ha causado ya, al menos, 47 activaciones involuntarias del sistema de seguridad, que han causado 18 heridos y dos accidentes, mientras que el fallo de los limpiaparabrisas ha provocado 25 informes de problemas menores, sin accidentes ni heridos.
En China Toyota retirará así sus vehículos Lexus IS producidos entre enero de 2006 y septiembre de 2011, según publicó la Administración General de Supervisión de la Calidad, Inspección y Cuarentena (AQSIQ).
La nueva normativa china, que supone un control más estricto sobre los fabricantes, "aumentará los costes, eso seguro", explicó al diario Paolo Beconcini, de la firma Carroll, Burdick & McDonough LLP, que asesora a fabricantes occidentales presentes en China sobre normas de calidad, seguridad y propiedad intelectual en el país.
"Los fabricantes tendrán que invertir más recursos internos para tener gente que trabaje en la investigación (sobre la calidad de sus productos), en apoyo del trabajo de la AQSIQ", señaló.
En 2012 hubo en total 113 casos de retiradas de vehículos en toda China, lo que implicó a cerca de 3,2 millones de modelos defectuosos, un 75 por ciento más que lo detectado en 2011.
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