Portugal compite sin complejos con España en la ruta veraniega de festivales

  • Portugal compite este verano sin complejos con España en la ruta europea de los festivales de música, con bandas de primer nivel, precios más económicos y paquetes que ofrecen conciertos junto a vacaciones de lujo.

Lisboa, 8 jul.- Portugal compite este verano sin complejos con España en la ruta europea de los festivales de música, con bandas de primer nivel, precios más económicos y paquetes que ofrecen conciertos junto a vacaciones de lujo.

Clásicos del pop-rock británico como Artic Monkeys, Morrissey o Franz Ferdinand, el "tecno" que mueve masas de David Guetta o el mestizaje de Manu Chao sonarán en los escenarios lusos, de norte a sur del país, en una agenda en la que poco falta.

Pero son los reclamos turísticos extra y las entradas más asequibles los que han aportado el elemento diferenciador frente a los competidores de España, el BBK Live de Bilbao y el Festival Internacional de Benicàssim (FIB) en la Comunidad Valenciana.

Las marcas distintivas son variadas: turismo de lujo con el Optimus Alive, un paraje natural de ensueño en Paredes de Coura, playas de primera en el Meo Sudoeste y en el Super Bock Super Rock, o el ecologismo como bandera en el Musa de Cascais.

"Competimos con algo más que música", señaló a EFE Álvaro Covoes, director de Optimus Alive, uno de los mayores certámenes musicales del país.

Según el promotor musical, el festival ha reforzado su estrategia de paquetes turísticos en los que se combina alojamiento de alta calidad con las entradas, lo que les da una ventaja competitiva frente a España.

"Quien viene al festival no solo viene por las buenas bandas, sino para disfrutar de la vida cosmopolita de una capital europea y de sus playas", afirmó el responsable.

El certamen inaugura, del 10 al 12 de julio, la temporada con uno de los carteles de mayor caché en la localidad de Oeiras, a unos pasos de Lisboa.

Las entradas para el primer día se agotaron con un mes de antelación para ver a los Artic Monkeys, que presentan en Portugal su quinto álbum, "AM", y su exitoso primer sencillo, "Do I Wanna Know?".

The Black Keys, el dueto estadounidense de "blues-rock", y el regreso de The Libertines completan un cartel menos cargado de leyendas que en ediciones anteriores, cuando pasaron por Oeiras The Cure y Radiohead en 2012, o Depeche Mode en 2013.

Este año, la organización ha captado a la española Russian Red en busca de contentar a un ya fiel público español, que llega principalmente de las regiones fronterizas, como Andalucía, Extremadura y Galicia.

La otra referencia del "indie" portugués, el Super Bock Super Rock, presentará del 17 al 19 de julio junto a la playa de Meco, en Sesimbra (sur de Lisboa) a Eddie Vedder, el vocalista del mítico grupo de "grunge" Pearl Jam.

Sus compañeros de escenario serán Massive Attack, que hará su única parada en la península Ibérica en Portugal, y Kasabian, que estará el día antes en el FIB valenciano.

En el norte de Portugal, el Paredes de Coura, con más de una década de experiencia, ofrecerá del 20 al 23 de agosto otra dosis de rock "indie" con nombres veteranos y savia nueva.

Los Franz Ferdinand suben el listón del cartel, que se complementa con los australianos Cut Copy, el joven cantautor británico James Blake y los exóticos estadounidenses Beirut.

Las sesiones de "indie-rock" cuentan con el añadido de un escenario idílico, en el valle de la playa fluvial de Tabao, un enclave natural entre río y mar, con piscinas naturales y cascadas a poca distancia.

Y el ya referente internacional, el Festival Músicas del Mundo, en las localidades de Porto Covo y Sines del Algarve, vuelve del 18 al 26 de julio, con otro maratón con músicos de los cinco continentes.

El preámbulo veraniego lo inauguraron la versión portuguesa del Primavera Sound, que se celebró el primer fin de semana de junio en Oporto, y el Rock in Río en Lisboa a finales de mayo, que sobrevivió a la crisis, después de que la organización suspendiera su edición en Madrid.

En Lisboa, no faltó la parada de la orquesta "indie" de Arcade Fire o el macroconcierto de los Rolling Stones, que contó con la aparición sorpresa de Bruce Springteen sobre el escenario.

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