"Suele decirse que los primeros discos de una banda siempre son los mejores. Y ahora lo entiendo. No sientes la presión de tener que componer bajo la planificación de un lanzamiento, y eso se nota, porque no fuerzas que las ideas salgan. Es todo más natural", ha expuesto el compositor, guitarrista y fundador de la banda Carlos López.
No en vano, todos los temas del álbum están "muy cuidados" y, aunque pueda sonar "contradictorio", se han hecho "para la gente, pero sin pensar en la gente".
"Primero nos tiene que convencer a nosotros. No nos podemos guiar por lo que la gente quiere escuchar, sino por lo que nosotros queremos trasmitir", ha secundado, por su parte, el bajista del grupo, Andrés Castro.
NACIMIENTO DE LA BANDA
El proyecto Midnight Sounds comenzó en 2011 cuando Carlos López envió a un concurso de música un par de maquetas de temas instrumentales grabados en casa. Finalmente, resultó ganador con el premio de mejor banda local y finaliza como tercera mejor de España.
Ante el compromiso de tener que tocar el concierto de mejor banda local, reunió al resto de integrantes de esa formación original, de la que hoy en día sólo permanece Andrés.
"Ha sido un año de locura. El disco es increíble, pero si me cuentan hace un año que iba a estar tan satisfecho con el resultado lo habría dudado", ha reconocido el fundador al hablar de este disco.
UN AÑO EN QUE SE COMPLETÓ LA BANDA
Así, ha sido un año en el que Midnight Sounds se ha tenido que readaptar completamente al pasar de ser una banda instrumental a banda con voz (Ramón Barba) y a la llegada de Anxo Silveira a la batería.
Carlos López ha explicado que, en cada canción del disco, "no sabes lo que te vas a encontrar". "Puede que estés escuchando rock duro y al momento cambiar a metal, jazz o funky", ha asegurado.
Es así la forma que tienen de entender cada canción, como "un lienzo en blanco donde lo único importante es transmitir una idea o un sentimiento". "Todo lo demás son recursos para llegar a cumplir ese objetivo", ha apostillado.
El disco fue grabado a finales de 2016 en los estudios del cantante y productor Iago Pico, en Pousada Son Studios, una experiencia de la que el grupo se siente "especialmente satisfecho". En palabras del propio Iago Pico, este disco "se sitúa en el nivel top en cuanto a discos de rock progresivo que hay en la actualidad en España".
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