Washington, 4 abr.- Centenares de viviendas resultaron afectadas en las últimas horas por el paso de varios tornados en la cuarta área urbana más poblada de EE.UU, que incluye las ciudades de Dallas y Fort Worth, ambas en el sureño estado de Texas, según el recuento que hicieron hoy las autoridades locales.
El Servicio Nacional de Meteorología detalló que los tornados afectaron esta zona del estado sureño de Texas desde el mediodía de ayer hasta la madrugada de hoy y causaron importantes daños materiales, pero no dejaron víctimas.
Desde esta mañana la población evalúa los efectos e intenta recuperar la normalidad.
En una de las localidades más afectadas, Lancaster, al sur de Dallas, las estructuras de 300 viviendas se vieron afectadas, de las cuales 150 sufren daños graves que impiden ser habitadas, según relató a Efe un portavoz municipal.
La localidad ordenó la pasada noche un toque de queda de doce horas por razones de seguridad y unas 150 personas se alojaron en un refugio habilitado por las autoridades, que se suma a otros dos abiertos en los municipios de Arlington y Dallas.
El ayuntamiento de Dallas informó hoy en un comunicado de siete viviendas totalmente destruidas por los tornados, cuarenta edificios residenciales inhabitables y múltiples casas sin techo o con partes de la estructura devastada.
Cerca de la ciudad, un aparcamiento se vio afectado ayer por el paso de un tornado cuando 254 camiones y 204 tráileres permanecían estacionados en ese momento.
Al hacer balance hoy, la compañía propietaria del centro logístico explicó que cincuenta vehículos sufrieron graves daños y algunos de ellos llegaron incluso a recorrer algunos metros en el aire por la fuerza del viento.
El aeropuerto DFW, situado entre Dallas y Fort Worth, canceló unos 400 vuelos desde ayer al mediodía especialmente por los daños ocasionados en las naves, pero está recuperando progresivamente su actividad, según informó en las redes sociales.
La instalación, centro de conexiones para la aerolínea American Airlines y octavo aeropuerto del mundo en pasajeros, distribuyó mantas, almohadas y material de higiene a los pasajeros que tuvieron que dormir en las terminales.
Se calcula que unas 120 naves estacionadas en el DFW están fuera de servicio por los efectos del temporal.
Las autoridades advirtieron a los ciudadanos que extremen la precaución en las horas posteriores a los tornados, cuando hay riesgo de incendio y explosión porque las líneas eléctricas y de gas se vieron dañadas.
Los tejanos intentan volver a la normalidad, las escuelas abrieron hoy sin problemas y los autobuses circulan en su horario habitual.
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