El jefe de las Fuerzas Navales del Mando Central, Kevin Donegan, ha indicado que la primera intercepción tuvo lugar en dicho mes, apuntando a una relación entre Teherán y los últimos disparos de proyectiles desde Yemen contra barcos estadounidenses en la zona.
"Creemos que Irán está conectado con esto", ha dicho, recalcando que Washington "sabe de dónde salieron las armas y a dónde iban". Entre las armas interceptadas hay fusiles de asalto Kalashnikov y misiles antitanque.
Asimismo, Donegan ha manifestado que el Gobierno iraní estaría entrenando a los huthis, argumentando que el uso de determinado armamento "no es algo que se lleve a cabo con un manual de instrucciones".
Por último, ha reconocido que es probable que hayan llegado armas enviadas desde Irán a manos de los huthis, resaltando que Estados Unidos "no investiga todos los barcos". "Tuvimos suerte de encontrar esos, pero ciertamente hay más", ha remachado.
Arabia Saudí lidera una coalición regional para apoyar al Gobierno del presidente, Abdo Rabbu Mansur Hadi, mientras que en el bando contrario se sitúan los rebeldes huthis y las fuerzas leales al exmandatario Alí Abdulá Salé, respaldados por Teherán.
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