Goldman Sachs afirma que la banca española es la más sana de toda Europa

  • El banco estadounidense ha hecho un ránking del sector financiero europeo descontando el impacto que podrá tener en cada entidad la creación de una supervisión conjunta en todo el Viejo Continente. Y el resultado es que los españoles aparecen como los más sanos.

Ruth Ugalde

Un reciente informe de Goldman Sachs, fechado el pasado 31 de julio, da por seguro que Europa contará en breve con una única supervisión financiera, en la que el Banco Central Europeo (BCE) y sus pupilos nacionales trabajarán unidos para garantizar un mejor funcionamiento del sistema financiero.

Además, también apuesta por ver en breve cumplido el acuerdo de la última Cumbre de Líderes, por el cual el Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera (MEDE) podrá rescatar directamente a los bancos, sin necesidad de que los países tengan que pedir ayuda ni soportar su carga, como ha solicitado España.

Estas dos máximas llevan al gigante estadounidense a intentar predecir los efectos que tendrá la supervisión común sobre cada una de las grandes entidades del Viejo Continente.

Y sus conclusiones son más que positivas para España ya que, según un ránking que ha elaborado sobre los criterios que dicta Bruselas, las entidades nacionales son las más sanas de todo el continente.

"La supervisión europea debe aportar transparencia y convergencia de los principales indicadores de supervisión", señala Goldman en su informe, ya que actualmente, según el gigante estadounidense, "existen grandes diferencias a la hora de juzgar el apalancamiento, la calidad del crédito y la liquidez".

Al unificar los criterios, la entidad considera que los bancos italianos y franceses se verán seriamente afectados, mientras que los españoles serán los que saldrían más victoriosos, sobre todo, porque ya están siendo sometidos a un fuerte ajuste tanto de capital como de calidad del crédito.

Los denominados Reales Decretos Guindos, que han disparado hasta un 70% el ratio de cobertura, según los cálculos de Goldman, juegan ahora en favor de los bancos españoles ante los requisitos de solvencia que conllevará una supervisión común.

Dentro de este diagnóstico general, el polémico banco americano cita como sus favoritos al español Santander, al alemán Erste Bank y al francés BNP.

Cómo debería ser la supervisión

Aunque los Estados todavía tienen pendiente definir cómo será la letra pequeña de la unión bancaria, Goldman estima que ésta afectará primero a las grandes entidades del continente, las consideradas sistémicas, aunque sostiene que lo deseable es que posteriormente se extiende a todas, incluidas las de menor tamaño.

"Limitar el ámbito de la supervisión común sólo a los grandes no es deseable, desde nuestro punto de vista. Los mayores bancos de la zona euro no fueron la principal causa de la inestabilidad financiera, ya sea durante esta crisis, o en la actualidad. Incluso los grandes bancos de la periferia -de la talla de Santander, BBVA o Intesa- tienen un rendimiento operativo sólido. Ellos no han requerido fondos del Estado hasta la fecha", explica Goldman para defender que la supervisión común se extienda a todas las entidades.

Como punto de partida intermedio contempla la posibilidad de que en un primer momento Bruselas centre sus esfuerzos en las 30 o 50 mayores entidades del Viejo Continente y, posteriormente, lo amplíe al resto.

No obstante, advierte que limitarse sólo a este grupo entraña importantes riesgo, al dejar fuera de la supervisión común a las cajas españolas y alemanas, a los bancos pequeños italianos y a los bancos mutuales franceses.

Como ejemplo para defender su tesis cita a las entidades que han dado lugar a Bankia -Caja Madrid, Bancaja, Ávila, Segovia, Canarias, Rioja y Laietana-, que habrían quedado fuera de la superisión europea y, en cambio, su fusión ha terminado necesitando una inyección de 23.000 millones de euros, de los cuales, 19.000 millones los aportará Bruselas.

Mostrar comentarios