La mitad de los jóvenes españoles tiene miedo a perder su empleo

España es el país del mundo desarrollado con mayor tasa juvenil. La Organización Internacional del Trabajo calcula que casi un 40% de los menores de 24 años está en el paro. De los que tengan trabajo (una vez excluídas en ambas cuentas los estudiantes), prácticamente la mitad tiene miedo de perderlo.

Para ser exactos, el 44% de los españoles entre 18 y 24 años temen que van a perder su puesto de una forma más o menos inmediata, según el último Informe Workmonitor elaborado por Randstad, que entrevista a trabajadores de 29 países.

En el conjunto del país, la preocupación se queda en un 29%, con una menor incidencia en el bloque de edades comprendidas entre los 45 y los 54 años, donde el pesimismo afecta al 14% de los entrevistados.

Los procesos de ajustes de plantilla, que están fomentando las jubilaciones anticipadas y las prejubilaciones a edades muy tempranas, empujan a los mayores a pensar en términos más negativos: su porcentaje es del 25%.

Justo un día después de que se hayan conocido los últimos datos del paro en España, que sufrió su peor mes de septiembre desde 1996, y de que el Gobierno admita que el último trimestre del año va a ser mucho peor de lo esperado, el informe de la empresa espcialista en recursos humanos deja claro que las sensaciones son especialmente malas en territorio nacional.

No en vano, el 29% de españoles que espera ser despedidos es una cifra seis puntos porcentuales superior a la media europea. Aun así, todavía estamos lejos del 40% de miedo que domina Grecia... aunque el caso heleno es claramente particular. El opuesto lo representa Alemania, donde el fatífico número se queda en el 17%.

Por sexos, los hombres lo ven peor, con un 31% de pesimistas, frente al 26% que registran las mujeres.

La formación también influye en la mentalidad. Cuanto más formados, más razones ven para perder el empleo. De esta forma, aquellos con estudios universitarios llegan a una cifra del 30% frente a la menor preocupación de los pocos cualificados (y pese a que éstos son los que tienen más problemas para encontrar empleo en estos momentos).

Por último, el miedo a quedarse en la calle igualmente por barrios. Los baleares (con un sorprendente 61%), los navarros (55%) y los gallegos (44%) ocupan el podio de los que auguran un final en sus contratos. Llama la atención la presencia de Navarra, una de esas autonomías que siempre saca los mejores resultados en los indicadores económicos.

Pero la curiosidad se repite entre los menos preocupados. Los vascos (eso sí es habitual, ya que es otra de las habituales regiones ricas) presentan un 14%, seguidos de extremeños (15%) y asturianos (17%).