Éstos son los riesgos ocultos de invertir en el oro

A pesar de que el oro, el valor refugio por excelencia, ha marcado varios máximos históricos en esta semana, los expertos recomiendan cautela a los inversores. “El rumor de que hay una sobrecompra del valor porque son demasiados los que han apostado por él últimamente, está creciendo a toda velocidad en el mercado”, comenta Iván San Félix, de Renta 4, que incide en que “este escenario es muy arriesgado, porque muy pronto podría darse la situación opuesta”.

Los síntomas de debilidad que está mostrando la recuperación económica a escala internacional, la inestabilidad que reina en las bolsas y hace dudar a los inversores y la depreciación del dólar, que sigue perdiendo posiciones frente a otras divisas como el yen o el euro, han disparado la cotización del metal precioso hasta los 1.283 dólares por onza, según los datos de Bloomberg.

Sin embargo, este atractivo se sostiene sobre unas bases bastante inestables. Para Rafael Pampillón, economista de IE Business School, “el futuro del oro vendrá determinado, entre otras cosas, por las turbulencias financieras, las presiones inflacionistas, la especulación y la recuperación de la economía mundial”.

El hecho de que el futuro del metal dependa de tantas y tan distintas variables aumenta el riesgo de invertir en él y reduce las posibilidades de acertar con esta apuesta. “Nadie puede saber al 100% lo que va a ocurrir con el futuro del oro porque es impredecible, es como apostar en una ruleta”, puntuliza Pampillón.

De hecho, los cambios en alguna de las variables que le influyen podrían dinamitar su tendencia al alza. “Si, por ejemplo, mejoran las perspectivas económicas, los bancos centrales internacionales venden parte de sus reservas o el dólar levanta el vuelo, el oro sufrirá. Tiene todas las de perder”, explica el analista de Renta 4. Su opinión la comparte el gurú George Soros, el mítico inversor, que tiene muy claro que la subida del precio del oro “no va a durar para siempre”.

Con todo, el consenso de expertos de Bloomberg establece que el oro podría moverse a corto plazo en una horquilla de entre 1.170 y 1.400 dólares por onza. De ser así, al metal aún le quedaría un recorrido alcista del 10% desde los niveles actuales hasta finales de año.