Fuencis Rausell
Valparaíso (Chile), 10 oct.- Tras dos décadas de actividad en la Marina francesa, el Sargento Aldea, un buque de transporte de tropas y apoyo en combate, se ha convertido este año en la nueva joya de la Armada chilena, que lo utiliza para prestar ayuda a comunidades aisladas.
Con 168 metros de eslora, el barco puede transportar tres barcazas, además de varias lanchas y cuatro helicópteros, tres de los cuales pueden ser operados simultáneamente en sus dos cubiertas de vuelo.
"El buque forma parte del Comando Anfibio de Transportes Navales (Comanfitran) junto con las barcazas Chacabuco y Rancagua, todas ellas con base en Valparaíso", explicó a Efe el subteniente Luis Valencia durante un recorrido por el barco.
El Sargento Aldea es, además, el tercer navío más grande de la Marina chilena, tras el Almirante Montt y el Araucano, dos petroleros de flota.
Con capacidad para cargar hasta 12.000 toneladas y desplazarse a una velocidad de 20 nudos (unos 37 kilómetros por hora), el navío está diseñado para albergar una dotación de 224 tripulantes, pero cuenta con 700 camas y puede trasladar hasta 1.300 personas.
Empleado en misiones civiles, sus características permiten evacuar con facilidad a grandes grupos de población en un país con unos 5.000 kilómetros de costa, una geografía marítima muy fragmentada y que además está expuesto a terremotos y erupciones volcánicas.
El buque cuenta con un hospital dotado con 51 camas, dos salas de operaciones, una clínica dental, una sala de rayos X, otra de tratamiento para quemados y un laboratorio de biología, además de doce cubiertas, tres de ellas bajo la línea de flotación.
"Tenemos distintos sistemas de navegación, el electrónico y la carta de papel estándar, la tradicional", detalló a Efe el oficial navegante Francisco Alomar.
"Generalmente estamos siempre comunicados (con el continente), no siempre emitiendo. Eso quiere decir que nuestros equipos se encuentran principalmente en escucha", explicó el encargado de informática, Luis Ponce.
En el contingente militar del barco, integrado casi exclusivamente por hombres, se ha ganado un lugar Jovanna Morales, que a sus 21 años es la única mujer del Sargento Aldea.
"Yo postulé en el año 2008, en la primera promoción femenina, y salí en 2011. Fue la primera generación de mujeres de mar", comentó a Efe con orgullo.
Construido entre 1987 y 1990, el buque, llamado antes TCD "Foudre", fue utilizado por la Marina francesa para desarrollar misiones de apoyo humanitario, de transporte y despliegue de medios militares en operaciones de paz en Europa, Asia y África.
En 2011 pasó a integrar la escuadra de Chile en sustitución de la barcaza Valdivia, dada de baja tras quince años de servicio.
De sus anteriores dueños quedan numerosas huellas en el este barco cuyos estrechos pasillos mantienen nombres franceses como Square Roland Garros o Boulevard Severin Decuers.
El buque izó la bandera chilena el pasado 25 de diciembre en el puerto francés de Toulon, ya bautizado como Sargento Aldea, en homenaje a Juan de Dios Aldea, uno de los héroes del Combate Naval de Iquique de 1879, en el que acompañó al capitán Arturo Prat en el abordaje del acorazado peruano Huáscar, que hundió a la corbeta chilena Esmeralda.
En su travesía al país sudamericano, en febrero el navío hizo escala en Haití, donde se embarcaron vehículos militares y pertrechos utilizados por el contingente chileno que participa en la misión de estabilización de Naciones Unidas en esa nación caribeña.
El 10 de marzo fue recibido en Chile por el presidente, Sebastián Piñera, y tres meses después, entre el 27 de junio y el 2 de julio, participó en su primera misión en tierras australes.
Fue en las pequeñas islas Mocha y Santa María, situadas a 600 kilómetros al sur de Santiago y golpeadas por el tsunami de 2010, donde se descargó material para la reconstrucción de viviendas y se realizó un operativo médico.
Ya en septiembre, el Sargento Aldea zarpó hasta el archipiélago Juan Fernández, adonde también llevó 250 toneladas de material para la reconstrucción y trasladó a unos 500 pasajeros en un viaje cuyo principal motivo era conmemorar un accidente de avión ocurrido allí hace un año.
A mediados de octubre, la Armada desplegará el mayor operativo médico de su historia y lo hará en la región austral de Aysén apoyada por el Sargento Aldea, donde se realizarán 6.000 consultas médicas.
El buque tiene ahora base en Valparaíso, el principal puerto del país, a unos 125 kilómetros de Santiago, pero el próximo año se trasladará a Talcahuano, a 531 kilómetros al sur, donde seguirá desarrollando actividades militares y apoyando labores civiles en tiempos de paz.
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