Este atentado fue cometido por un kamikaze, identificado como Abu Sinan al Najdi, quien hizo detonar su cinturón con explosivos en una mezquita de Abha, capital de la provincia de Asir, agregó el EI en un comunicado de su rama "Provincia de Al Hijaz".
El ataque "terrorista", perpetrado durante la oración musulmana del mediodía, también dejó nueve heridos, tres de ellos de gravedad, indicó el ministerio del Interior.
El portavoz del ministerio, que había dado un primer balance de 13 fallecidos y nueve heridos, había dado a entender que se trataba de un atentado suicida.
"Se encontraron restos humanos en el lugar, que podrían deberse a la detonación de un cinturón de explosivos", explicó.
El gobernador de la provincia de Asir, el príncipe Fayçal ben Khaled ben Abdel Aziz, denunció un atentado destinado a "desestabilizar el país y a provocar miedo entre los ciudadanos", según la agencia oficial saudita.
Es uno de los ataques más sangrientos de los últimos años contra las fuerzas de seguridad sauditas, que ya perdieron a dos efectivos en julio en un atentado con coche bomba en Riad reivindicado por EI.
Arabia Saudita, que forma parte de la coalición dirigida por Washington contra el EI en Irak y en Siria, multiplicó en los últimos meses las detenciones de extremistas sunitas sospechosos de planificar ataques para "avivar las tensiones confesionales".
La provincia oriental de Arabia Saudita vivió en mayo dos atentados contra mezquitas chiitas reivindicados por el EI que causaron 25 muertos.
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