La maniobra de Iglesias favorece al PP en el control del Congreso

Las negociaciones para la composición de la Mesa del Congreso-este martes-han seguido los mismos ritmos que las del Gobierno. Lentas, encalladas y sin acuerdos cerrados, aún en la víspera de que las Cortes deban quedar constituidas. 

Todos los avances habrían de producirse este mismo lunes, si es que los grupos tienen alguna voluntad de pacto.  Por aritmética parlamentaria, y según los resultados del 26-J, al PP le corresponden cuatro puestos en ese órgano, dos al PSOE y otros dos a Unidos Podemos. Ciudadanos, sin presencia, depende de la buena voluntad de otro partido para tener representación. Posible acuerdo PP-Ciudadanos

La opción más probable es que ese partido sea el PP, que podría tener así un as en la manga para presionar a Rivera para un cambio de postura en la investidura. La otra alternativa, un acuerdo de izquierdas entre PSOE y Podemos se complicó este domingo después de que En Comú Podem, los socios catalanes de Iglesias, decidiesen presentar a Xavier Doménech como candidato a presidir el Congreso. 

Pese a que en un principio el PP había mostrado una clara disposición de ceder la presidencia, si ello favorecía en sus aspiraciones de Gobierno, insiste ahora en que es a ellos, en tanto partido más votado, a quien corresponde. 

Desde Ciudadanos se han mostrado favorables a apoyar un acuerdo idéntico al que se tejió en la legislatura fallida, cuando el pacto PP-PSOE-Ciudadanos dio a Patxi López la presidencia. Los gestos de los últimos días hacen prácticamente impensable esta opción. C's rechaza "intercambios de cromos" con el PP

Todos los partidos han mantenido en la última semana negociaciones cruzadas para avanzar en sus negociaciones. La más plausible es que PP y Ciudadanos cierren algún acuerdo para que los de Rivera puedan estar en la Mesa. En ese acuerdo, incluso, los populares podrían estar dispuestos a ceder la presidencia a un diputado naranja, posiblemente Ignacio Prendes, para que presida la Cámara. 

Cesiones que desde Ciudadanos se interpretan casi a modo de chantaje. Los de Rivera insisten en que su abstención en la investidura es "firme" y que la negociación de la Mesa no puede usarse como moneda de cambio en el desbloqueo de Gobierno. El portavoz de Ciudadanos en Madrid, Ignacio Aguado, negó este domingo "un intercambio de cromos" con el PP, por el que su partido pudiese dar el 'sí' a Rajoy para ser presidente del Gobierno de España. Podemos frustra un acuerdo con el PSOE

La negociación con el PSOE parece más compleja, en especial por el bloqueo que Sánchez ha impuesto a Rajoy. Después de trasladarle el rechazo "al día de hoy" a apoyar su investidura, es poco probable que los socialistas hagan ahora algún intento de pacto. El candidato, en caso de presentarlo, seguiría siendo López, pero esa opción tiene solo 85 votos, los de su grupo, asegurados. 

La vía pretendida por el PSOE era la de un acuerdo con Unidos Podemos y Ciudadanos, casi frustrada con la candidatura de Domènech. 

Iglesias ha intentado una fórmula propia, con negociaciones paralelas con los partidos independentistas para aupar a su socio catalán. La postura de estas formaciones es, en cambio, desigual. 

En diciembre, Podemos ya presentó un candidato alternativo, Carolina Bescansa. Una respuesta al rechazo que provocó entonces el acuerdo a tres que dio a López la presidencia.  La primera decisión: los grupos de CDC y Podemos

Uno de los primeros asuntos de la Mesa será decidir si el partido Democracia i Llibertad, antigua Convergencia, puede formar Grupo propio o, pasar al Grupo Mixto. La decisión depende de una interpretación de la Mesa.

También de ello depende que las confluencias de Podemos puedan disponer de grupo propio, como ya exigieron en la pasada legislatura. La interpretación estricta del Reglamento no lo contemplaría, ya que exige que los partidos hayan competido electoralmente en el territorio. Este fue el principal argumento que emplearon todas las formaciones para vetar la reclamación. Los socios de Podemos acabaron integrándose en el grupo de Iglesias, a excepción de los cuatro diputados de Compromis, que se pasaron al Grupo Mixto.

Pese a que en esta ocasión las confluencias habían mostrado su confianza en que una mayoría de izquierdas, con el PSOE, les permitiese lograr grupo, los socialistas no son partidarios.

Ésta es sin duda la función más importante de la Mesa. Una vez arranque la legislatura, le compete calificar iniciativas, autorizar los gastos de la cámara y otras cuestiones de funcionamiento y ordenar los debates.

La Mesa está formada por nueve miembros, cuatro vicepresidentes, cuatro secretarios y un presidente.Así se vota 

Este martes, 19 de julio, a las 10 de la mañana, se constituyen las Cortes resultantes de las elecciones del 26-J. Será entonces cuando se vote para elegir los miembros del Congreso y del Senado.

La sesión está presidida por el diputado de más edad, que es asistido por los dos más jóvenes, que actúan como secretarios. La denominada Mesa de Edad está compuesta por las mismas diputadas que en diciembre: María Teresa de Lara (PP, 72 años) como presidenta, y María Such Palomares(PSOE, 25 años) y Nagua Alba (Podemos, 25 años), como secretarias.

Tras la formación de esta Mesa de Edad, se constituirá de forma definitiva el Senado, salvo que existan impugnaciones contra algunos senadores elegidos por designación directa que afecten a un 20% del total de los escaños.

A continuación, se procederá, en ambas Cámaras, a la elección de su órgano de gobierno: la Mesa, cuyos miembros se designan mediante votación secreta con papeleta y urna. Para el cargo de presidente, resultará elegido, en ambos casos, el que obtenga el voto de la mayoría absoluta.

Si en primera votación ninguno de los candidatos lograra dicha mayoría, se repetirá la votación entre los dos que hayan sumado más apoyos y resultará elegido el que obtenga más votos, es decir, mayoría simple.

Concluidas las votaciones de todos los miembros de las Mesas del Congreso y del Senado, los elegidos ocuparán sus puestos y el presidente electo presentará y solicitará de los demás diputados y senadores el juramento o promesa de acatar la Constitución.

Pero antes de este trámite, para poder obtener la plena condición de parlamentario, los diputados y senadores habrán tenido que presentar en sus respectivas Cámaras las credenciales expedidas en el órgano correspondiente de sus respectivas circunscripciones y haber realizado la declaración de actividades que establece la Ley Orgánica del Régimen Electoral General.

Tras la ronda de juramentos o promesas, los presidentes del Congreso y el Senado, que podrán pronunciar un discurso si así lo desean, declararán constituidas las Cámaras, y se lo comunicarán al Rey, a la otra Cámara y al Gobierno.

Las Mesas de cada Cámara se reunirán una vez levantada esta primera sesión para comenzar a formalizar la creación de los grupos parlamentarios, que deberán estar creados en los cinco días siguientes. Los parlamentarios que no se adscriban a ningún grupo pasarán a formar parte del Mixto.

Constituidas las Cámaras, el presidente del Congreso informará al Rey y a partir de ahí, el Jefe del Estado abrirá una ronda de consultas con los partidos con representación parlamentaria para poder proponer el candidato a la Presidencia del Gobierno, que habrá de comunicar al presidente del Congreso, para que éste convoque el Pleno de investidura.