EL CONGRESO CONTEMPLA UNA “PREVISIBLE” SUBIDA SALARIAL DEL 1,5% PARA 2018

La Mesa del Congreso de los Diputados aprobó este martes el Presupuesto de la Cámara Baja para 2018 en el que se contempla un “previsible” incremento de los salarios del personal de la institución de un 1,5%.
En un comunicado, el Congreso matizó que esta subida salarial “se ajustará en función de la subida de retribuciones que se establezca para la Administración del Estado”.
La Cámara explicó que los sueldos de los diputados y el personal de la Cámara se redujeron hasta un 10% en 2010, y han permanecido congeladas hasta el ejercicio 2017, para el que se acordó una subida del 1%.
Esta subida está incluida en el Presupuesto del Congreso de los Diputados para 2018, el cual se incrementa un 1,7% hasta los 86,98 millones de euros con respecto a la cifra de 2017. Sin embargo, la Cámara indicó que la reducción acumulada de los últimos siete ejercicios es del entorno del 11,3%.
El gasto de personal se incrementa un 2,86%, hasta los 39,2 millones de euros, un aumento que responde a la subida del 1,5% del sueldo de los funcionarios de la Cámara.
También se contempla la previsión de incremento de las cuotas de la Seguridad Social, que responde al aumento del personal eventual, y la previsión del pago de retribuciones complementarias por la creación de nuevas comisiones.
En cuanto a los gastos corrientes en bienes y servicios, estos experimentarán una reducción del 1,42%, debido fundamentalmente al ahorro del 14,31% en concepto de transportes. Mientras, los gastos financieros se mantendrán en los 4.000 euros.
En lo que respecta a las transferencias corrientes, estas crecen un 7,25% por el aumento en la dotación del concepto de subvenciones a grupos parlamentarios de un 1,5%, y la previsión del presupuesto máximo de licitación del contrato de cafetería y restauración, que finalmente se ajustará a la cifra que se consigne en el contrato, una vez resuelto el procedimiento.
Finalmente, las inversiones reales tendrán un importe de 3,3 millones, un 2,5% más, por los nuevos proyectos de inversión, la reposición y mantenimiento operativo de la maquinaria, instalaciones y mobiliario, y los gastos de carácter inmaterial como el mantenimiento y renovación de licencias de software, de gestión de bases de datos o de programas especializados.