Las afecciones al tráfico se irán realizando de forma paulatina, con el inicio de la mayor envergadura de la intervención en los meses estivales, según detalla el Ayuntamiento alcalareño en un comunicado. Así, indica que la obra ha comenzado por el tramo peatonal de la calle Sánchez Perrier con tareas de iniciación, labores de reconocimiento y catas, habilitándose como zona de acopio de material los laterales de la Plaza del Perejil, en torno al monumento a la Judea.
El proyecto consiste en actuaciones para garantizar y mejorar el suministro de agua y su correcta distribución, y tareas de saneamiento con un nuevo colector y acometidas domiciliarias, cuyas obras estarán terminadas antes de Navidad.
Por un lado, en cuanto a abastecimiento, se instalarán 1.062 metros de tuberías de fundición dúctil que se ejecutará por el procedimiento de zanja a cielo abierto. Para el saneamiento, se contempla un colector de gres con una longitud total de 236 metros con sus correspondientes acometidas domiciliarias e imbornales para favorecer la recogida y canalizaciones de aguas pluviales.
Además, durante las actuaciones se sustituirán las redes existentes en la calle Sánchez Perrier con la instalación de 316 metros de tubería que no implicará la interrupción del suministro.
AFECTACIÓN AL TRÁFICO
Entre el 5 de junio y el 1 de julio se desarrollarán los trabajos en el tramo peatonal de la calle Sánchez Perrier por lo que no se afectará al tráfico más que durante los primeros días de esta intervención, que se actuará en la intersección de esta vía con la calle El Perejil. Será necesario cortar un carril de esta última a la circulación, concretamente el acceso desde la calle San Francisco.
Esto obligará, por un periodo que se prevé sólo de unos días, a que el acceso a la calle San Fernando o la barriada San Miguel, más conocida como barriada del Castillo, y a los aparcamientos de la biblioteca Editor José Manuel Lara no pueda realizarse desde dicha calle, pero sí a través de la cercana Nicolás Alpériz hacia Plaza del Duque y El Perejil. La doble circulación se restablecerá en breve, en cuanto la obra lo permita. Por su parte, el sentido de salida de ambas zonas no variará.
Llegado el mes de julio la actividad en la calle Sánchez Perrier pasará al tramo abierto a la circulación, lo que obligará a mantenerlo cortado. La parte más complicada de la obra, en lo que se refiere a tráfico, será la intervención en la calle Orellana, que comenzará en agosto, quedando cerrada la salida hacia Sevilla por dicha calle con la correspondiente señalización de aviso y vías alternativas.
En este sentido, añade que existe, no obstante, el compromiso de tener habilitado el paso para la festividad de la patrona de la ciudad, Nuestra Señora del Águila, el 15 de agosto, y continuar después la intervención.
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