La estrella del pop Lady Gaga pudo haber sido la invitada de la final de Eurovisión 2017. La artista estuvo en negociaciones con el equipo que preparó el Festival para que actuase el pasado 13 de mayo en Kiev.
Tal y como ha informado en medio de comunicación ruso Karabas Live, los productores querían que la estrella internacional hiciera una aparición estelar en el escenario de Eurovisión durante el interval act, tiempo que se dedica a la recogida de los votos.
Al parecer la idea no llegó a buen puerto dado que la artista norteamericana pidió un caché que oscilaba entre los 100.000 y 200.000 euros, una cantidad a la que Eurovisión no pudo hacer frente y por lo que canceló la aparición de Gaga.
El pasado año Justin Timberlake apareció en la final de Eurovisión celebrada en Estocolmo, Suecia, y por la que no cobró. El artista consideró adecuado utilizar el gran foco mediático para presentar un nuevo trabajo discográfico que después se convertiría en un superventas.
En lugar de la actuación de Lady Gaga, la organización tomó la decisión de emitir las actuaciónes de las ucranianas Ruslana, ganadora de Eurovisión 2005, y Jamala, ganadora de Eurovisión 2016.
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