Allen, tras la estela de Kevin Spacey: con problemas para poder hacer su película

Pocos directores han gozado del prestigio de Woody Allen en las últimas décadas. Dotado de un talento natural para imponer su sello detrás de la cámara, su estreno anual era un evento cinematográfico en sí mismo. Pocos estrenos eran tan esperados como el del director norteamericano, caracterizado además por ser capaz de estrenar una película al año desde 1977. A sus 82 años, esta estadística se ve amenazada por la polémica avivada por el movimiento #MeToo y la acusación por parte de su propia hija adoptiva, Dylan Farrow, de abusar sexualmente de ella hace 26 años. Su última película, 'A rainy day in New York', prevista para finales de este año, podría no ver la luz

Amazon, responsable de su producción y distribución, estaría planeando no estrenarla y romper el acuerdo que tenía con el director según informa el portal web Page Six. Algo similar a lo que le sucedió a Kevin Spacey, que se vio apartado del reparto de 'Todo el dinero del mundo', de Rydley Scott, tras ser acusado de abusos sexuales por parte de un joven actor.

En 2016, la compañía de comercio electrónico y Woody Allen firmaron un acuerdo para estrenar seis películas durante los próximos seis años. Dos de ellas, 'Café Society' y 'Wonder Wheel', ya fueron estrenadas aunque el estreno de este 2018 aún no tiene fecha prevista, según informa el citado portal web. Ya a principios de este año, un artículo en el diario Hollywood Reporter informaba que Amazon habría pensado en romper el acuerdo con el realizador norteamericano, aunque hasta la fecha no se ha confirmado este punto. "Woody amar trabajar, nunca se toma unas vacaciones, pero se tomará un descanso este año hasta que no encuentre un patrocinador", dice una fuente citada por PageSix. Y es que, aunque 'A rainy day in New York' ya está rodada, su próximo proyecto aún no tiene financiación.

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Tras la denuncia por parte de Dylan Farrow de que Allen abusó sexualmente de ella hace 26 años, su figura "comenzó a convertirse en algo tóxico", cuenta un productor de Hollywood a Page Six. "Siempre tuvo grandes actores, porque trabajar con él les daba prestigio como intérpretes, pero ahora es algo perjudicial para ellos", relata la misma fuente. Algunas estrellas de 'Rainy Day', como Rebecca Hall, Timothée Chalamet o Griffin Newman ya donaron los salarios percibidos en la película a distintas organizaciones para víctimas de abusos sexuales. "Mis acciones han hecho que otra mujer se sintiera silenciada y desgraciada", escribió Hall en su perfil de Instagram.

Fuentes del entorno del director, cita Page Six, afirman que nada de esto es cierto. Habrá que esperar unos meses para conocer si Woody Allen, de la misma forma que le sucedió a Kevin Spacey, también acusado de abusos sexuales, se convierte en otra estrella caída a los infiernos de la industria de Hollywood. La estrella de Allen, uno de los más aclamados directores de la historia, podría apagarse para siempre.