Ben Hanlin, el mago callejero más divertido, vuelve a "Detrás de la magia"

Alejandra Olcese

Londres, 24 mar.- El ilusionista británico Ben Hanlin, experto en trucos de cartas y magia callejera, desafiará a la muerte con trucos "increíbles, divertidos y terroríficos" en la nueva temporada de "Detrás de la magia", un programa basado en la ciencia.

La cadena Discovery MAX presenta este viernes la segunda temporada de "Breaking Magic (Detrás de la magia)", con Hanlin, los estadounidense Wayne Houchin y Nate Staniforth y la canadiense Billy Kidd como protagonistas.

En el Reino Unido, el estreno fue el pasado 12 de marzo.

"Me gusta que en 'Detrás de la magia' estoy haciendo algo que nunca creí que haría. Nunca pensé que haría ciencia con magia porque yo solía portarme fatal en las clases de ciencia, la profesora me gritaba... así que el hecho de poder hacer las dos cosas a la vez es lo mejor", afirmó Hanlin, entre risas, en entrevista con Efe.

Su maestría con las cartas y sus trucos a pie de calle, en los que simula ser un viandante cualquiera, le han llevado a ser uno de los miembros más jóvenes del prestigioso Círculo de la Magia, una organización internacional, fundada en Londres en 1905, que reúne a los mejores magos del mundo.

Hanlin, de 26 años, es conocido por su picardía y sonrisa contagiosa y afirma que no podría hacer magia con un rictus serio y misterioso.

"Por supuesto que existe la magia", afirma rotundo, si bien explica que, cuando hace sus trucos, le confiesa a la gente que no tiene "poderes mágicos ni habilidades especiales", sino que ha aprendido cosas que "parecen magia real".

Sobrevivir a la espada de Damocles -que pende sobre la cabeza de los magos y en cualquier momento puede caer-, soltarse de unas cadenas de hierro y conseguir emerger a la superficie de un tanque lleno de agua o leer la mente son algunos de los desafíos a los que se enfrentará Hanlin en la nueva temporada de "Detrás de la magia".

Entre sus mejores artificios, el británico, nacido en Birmingham (centro de Inglaterra), recuerda el día en que dejó caer un enorme contenedor sobre un Bentley, lo destrozó en pedazos y después lo hizo aparecer flotando en un lago cercano.

"Por supuesto no puedo decírtelo", respondió a la pregunta de cómo lo hizo.

A Hanlin le gusta "pasarlo bien" haciendo creer a la gente que no es mago, cuando rompe sus tarjetas de crédito, sus teléfonos móviles o sus coches y después los repara con "trucos inesperados".

Su mago favorito es el estadounidense David Blane, al que conoció mientras hacía trucos en la calle y el que le metió en el mundo de la magia en 1997, aunque también admira al español Juan Tamariz, "cuyos juegos de cartas son brillantes", señala.

Hanlin sostiene que él "es diferente" a su compatriota Steven Frayne, apodado "Dynamo", con el que le han comparado muchas veces y que es uno de los magos más populares actualmente por su serie de televisión "Dynamo: el mago" en la que camina sobre las aguas del Támesis, entre otras cosas.

"Dynamo hizo que a la gente le gustara de nuevo la magia, porque no había magia en la televisión. Cuando me comparan con él lo hacen como un cumplido, porque es el más popular, pero creo que somos diferentes. A mí me gusta pasarlo bien, reírme, no puedo poner una cara seria mientras hago magia, no funciona", explicó.

Hanlin no es partidario de desvelar los trucos y afirma que es bueno "tener un poco de misterio en la vida".

La segunda temporada de "Detrás de la magia" tendrá dieciséis episodios de media hora rodados en las calles de Nueva York, Londres y Varsovia, en los que los magos "llevarán la ciencia al público" y combinarán "espectáculos teatrales con principios empíricos".

La primera temporada se estrenó en enero de 2013 y "cautivó a seguidores en 211 países distintos", según Discovery Max.