Brasil baila a ritmo de comparsa y el sambódromo de Río abre sus puertas

  • Marta Berard

Brasil baila a ritmo de comparsa y el sambódromo de Río abre sus puertas
Brasil baila a ritmo de comparsa y el sambódromo de Río abre sus puertas

Marta Berard

Río de Janeiro.- Las escuelas de samba de Río de Janeiro cuentan las horas para el desfile que desde hoy y hasta el martes llenará de música, luz y color el sambódromo de la ciudad, mientras los ciudadanos siguen de fiesta en las calles de Brasil al ritmo de las comparsas y bandas callejeras.

Con nervios, tensión y mucha dedicación los equipos técnicos de las escuelas del grupo especial, la máxima categoría del carnaval, que esta noche abren la primera jornada de desfiles en el Sambódromo Marqués de Sapucaí, ultiman los preparativos y repasan las carrozas con las que intentarán deslumbrar a los espectadores.

En esta primera velada, que se prolongará hasta la mañana del lunes, la escuela Sao Clemente abrirá el espectáculo con un homenaje a la propia ciudad bajo el eslogan "Río, bendecido por Dios y bonito por naturaleza".

"Estoy trabajando desde las nueve y me quedaré hasta que termine porque nosotros somos los primeros en desfilar", dijo a Efe Filipe Rodrigues, uno de los miembros del equipo técnico de la Sao Clemente, mientras daba los últimos toques a una carroza que, según explicó, la escuela empezó a construir el pasado mes de noviembre.

Las seis escuelas que desfilarán en la primera noche en el sambódromo llegaron hoy a la céntrica Avenida Presidente Vargas, donde hacen el montaje final de las carrozas y disfraces con los que recorrerán a paso de samba los 700 metros de la pista de la Marqués de Sapucaí.

El programa continúa con la "saludable" propuesta de Imperatriz Leopoldinense, una de las escuelas de más solera y más tradición técnica, que defiende los efectos beneficiosos para la salud de la samba y usa como hilo conductor la historia de la medicina desde la época del antiguo Egipto.

También desfila hoy Portela, la agrupación que más carnavales ha ganado, 21 en total, que en esta edición está fuera de concurso y debe hacer un desfile modesto tras perder parte del material que tenía preparado en un incendio registrado hace un mes en la Ciudad de la Samba, un conjunto de talleres donde las escuelas elaboran sus trabajos.

El siniestro también afectó a Uniao da Ilha y Grande Río, está última escuela conocida por contar con la participación de celebridades y estrellas reconocidas por el público brasileño.

En solidaridad, las demás escuelas prestaron materiales y mano de obra a las agrupaciones afectadas por el fuego, y la Liga Independiente de las Escuelas de Samba (Liesa), organismo que rige los desfiles, decidió que a diferencia de otros años, en los que las dos con peores calificaciones bajan de categoría, este año ninguna será rebajada.

Los desfiles de hoy se completan con las presentaciones de Unidos da Tijuca, ganadora del carnaval del año pasado y una de las más arriesgadas que suele sorprender al público por las innovadores propuestas de su director creativo, Paulo Barros.

La escuela Vila Isabel contará con la participación de la modelo Gisele Bundchen en un desfile que habla de los mitos y leyendas sobre los cabellos, mientras que la popular Mangueira será la encargada de cerrar la jornada con una presentación dedicada a Nelson Cavaquinho, uno de sus insignes compositores.

Fuera del sambódromo, los cariocas y su natural inclinación por la fiesta volvieron a ser los protagonistas de las calles al son de las 91 bandas callejeras que hoy pusieron música al carnaval.

La agrupación Bangalafumenga, con una banda de más de 100 integrantes, en su mayoría mujeres, congregó a más de 40.000 personas en el sur de Río al son de ritmos clásicos brasileños como el forró.

Mientras, los seguidores la banda Cordão do Boitatá recorrieron el casco antiguo de Río ataviados de creativos disfraces.

En la ciudad nororiental brasileña de Salvador, otro epicentro del carnaval, la cantante Ivete Sangalo, ídolo local, hizo las delicias de los asistentes.

Hasta el próximo martes, Brasil celebra su carnaval, la festividad popular más importante del calendario brasileño, que durante cinco días viste de luminosidad, sensualidad y diversión el país de la samba.

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