'Che, Guerrilla', una segunda parte confusa de la vida del revolucionario

  • Redacción Internacional, 26 feb (EFE).- 'Che, Guerrilla', la segunda parte del monumental proyecto que Steven Soderberh ha dedicado a la figura del revolucionario argentino, es un filme casi intimista, árido y claustrofóbico que se pierde en sus propios pensamientos y en un confuso guión.

Redacción Internacional, 26 feb (EFE).- "Che, Guerrilla", la segunda parte del monumental proyecto que Steven Soderberh ha dedicado a la figura del revolucionario argentino, es un filme casi intimista, árido y claustrofóbico que se pierde en sus propios pensamientos y en un confuso guión.

Soderbergh rodó una historia de 4 horas y 28 minutos -que se dividió en dos películas para su comercialización, "El Argentino" y "Guerrilla"- con la que ha tratado de dar su visión de este icono del siglo XX, alejándose de los clichés hollywoodienses y mostrando partes menos conocidas de la vida de Ernesto "Che" Guevara.

En especial en la segunda parte, la que mañana llega a las pantallas españolas, que cuenta el declive del Che y su huida a Bolivia, donde trató de repetir, sin éxito, el modelo de revolución que había triunfado en Cuba bajo el liderazgo de Fidel Castro.

Y aunque esta parte de la historia es la que más interesaba a Soderbergh -el director dijo en su presentación en el Festival de Cannes que la primera parte es comercial, una concesión a Hollywood, y la segunda un filme de autor-, el resultado es mucho más débil.

Frente a una primera parte centrada en la revolución cubana, llena de fuerza y con una eficaz estructura narrativa que mezcla diferentes momentos de la historia, la segunda, que se desarrolla casi en exclusiva en Bolivia, se hace pesada, lenta y carente de interés.

Pese a que la interpretación de Benicio del Toro, como el Che, es igual de impresionante en ambos filmes, en el segundo se ve rodeado de decenas, por no decir centenas, de personajes apenas esbozados, que aparecen sólo unos minutos (algunos incluso segundos) en la pantalla y que logran confundir una historia ya de por sí confusa.

Desde el estadounidense Matt Damon al portugués Joaquim de Almeida, pasando por la alemana Franka Potente, el argentino Gaston Pauls o los españoles Jordi Mollá, Carlos Bardem, Eduard Fernández y Oscar Jaenada, la sucesión de personajes sin solución de continuidad impiden que la historia tenga una base más allá de la figura del Ernesto"Che" Guevara.

Ubicada supuestamente en la selva boliviana (el rodaje se realizó en parajes de la ciudad española de Huelva), se centra en el fracaso del Che como revolucionario pero principalmente en su decadencia personal, objetivo fílmico que sólo Del Toro parece querer lograr.

"Guerrilla" se estrena mañana en España, tras un corto recorrido comercial en Estados Unidos, donde apenas ha logrado un millón de dólares (784.000 euros) de recaudación, y llegará a las pantallas latinoamericanas a partir de abril.

Por Alicia García de Francisco

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