Gorka Otxoa: "Si fuera un fantasma, igual putearía a algún político o a algún futbolista"

Hace ya dos años del estreno de 'Pagafantas', su primera película. Ayer volvió a los cines con un nuevo protagonista que se mueve entre la ternura y la comedia. En '¿Estás ahí?' Gorka Otxoa es un chico al que su novia, convertida en fantasma, no le deja seguir hacia delante con su vida, dar el siguiente paso. Una comedia dirigida por Roberto Santiago ('El penalti más largo del mundo') en la que comparte cartel con su amiga Miren Ibarguren. Además, acaba de terminar el rodaje de 'Lobos de Arga' –una de hombres lobo con risas– y pronto estrenará en TVE la serie 'Plaza de España'. Todo en clave de comedia.

'¿Estás ahí?' es una comedia que de pronto se torna un tanto emotiva ¿cómo la definirías tú?

Es una comedia romántica-fantástica, diría yo. Una comedia muy cachonda, muy divertida. A ratos con grandes carcajadas y a ratos con cosas que te llegan al corazón, que son emotivas. Hay gente que sale con la lagrimilla. En el primer pase se me llenaron los ojos. Cuando lo haces no sabes si vas a conseguirlo, pero hacerlo es maravilloso. Conseguir reírte es complicado, si además te toca el corazocito, te recuerda cosas, te hace pensar, sentir… pues bienvenido sea y objetivo cumplido.

Estamos acostumbrados a verte en la comedia, ¿prefieres hacer reír?

Me gusta todo. Con la comedia te lo pasas muy bien haciéndola, pero con el drama también. Soy actor, así que lo que me den, encantado de la vida. Cuando estás haciendo la secuencia no estás pensando en "aquí que lloren, aquí que rían" porque entonces no consigues nada. El objetivo es lo que está marcado, lo que siente el personaje en ese momento, lo que está ensayado con el director. Luego una misma cosa puede provocar en unos apatía, en otros risa y en otros que lloren. Parece que en esta película se consiguen ambas cosas.

¿Y cómo espectador? ¿Te gusta llorar o reír en el cine?

Pues depende. A veces según qué comedias no me hacen gracia por el tipo de humor y otras, sí. Y luego hay películas románticas que sí me gustan y otras que no. Más que de géneros soy de pelis buenas que me hagan emocionarme, sentir algo…

También depende un poco del día, ¿no?

Sí, sí. El día que tengas, el momento de tu vida en el que estés, lo que proyectes en los personajes, en la película… Depende de con quién la veas… Mil cosas inciden. De hecho una misma película vista en distintos momentos de tu vida las vives de forma diferente. El objetivo es que sientas algo, que no te aburras. Conseguir eso es lo bonito. Y yo estoy aquí para lograrlo.

El director ha dicho que siempre pensó en ti para el papel y que cuando te lo ofreció ni siquiera tenía el guión escrito, ¿cómo aceptas un papel del que no has leído el guión?

Pues escuchando a un director apasionado, que me cayó desde el primer momento de p… madre. Además el proyecto estaba basado en una obra que no había tenido oportunidad de ver pero de la que sí había oído hablar maravillas. Y porque sonaba muy bien. Me contó la historia, cómo la iba a hacer y conecté muy bien con él y con la película. Además, proyectos bonitos tampoco hay muchos para elegir ni para hacer. Así que me embarqué encantado.

¿No es mucha presión eso de que el director tenga tan claro que tienes que ser tú?

Al contrario, te da más tranquilidad. Si te ha elegido porque le han presionado los productores y él no lo quería es peor punto de partida. Mejor que él confié en ti. Eso te da confianza y te hace estar más relajado y trabajar mejor.

Cuando rodasteis '¿Estás ahí?', Miren Ibarguren y tú compartíais piso. ¿Cómo es eso de rodar con la persona que vives? ¿Te llevas los problemas del trabajo a casa? ¿O los de casa al trabajo?

Una mezcla, porque salíamos del ensayo y nos íbamos a casa juntos y seguíamos hablando, compartiendo, comentando. Es muy curioso. Nunca había hecho una película con un compañero de piso. Primero fue una casualidad mágica y maravillosa. Y segundo, una suerte. Una persona con la que has trabajado en varias obras de teatro, que hace años que la conoces, que te has ido a Madrid, compartes piso con ella y nos llaman para hacer una películas juntos.

El director dice que cuando te comentó que le había ofrecido el papel a Miren no le hablaste de este 'pequeño' detalle.

Cuando me lo comentó la primera vez no se lo dije para que no influyera ni positiva ni negativamente. Fui discreto. Pero sí le dije que la conocía desde hacía mogollón, que sería maravilloso y que me parecía una actriz increíble. Después, cuando se enteró de que compartíamos piso, flipó. Habló del destino y la magia.

A tu personaje le preguntan en una escena de la película si cree en los fantasmas, así que… ¿Crees en los fantasmas?

No te podría decir ni que creo absolutamente ni que son una tontería y no existen. Ninguna de las dos. Creo que hay algo, energías, recuerdos… Algo sí queda ahí. No sé si fantasmas como los enseñamos en las películas o como los hemos visto en el cine y en novelas. Que puede haber algo por ahí, puede ser. No desmentiría ni una cosa ni la otra. Pero la película no entra a debatir eso, ni a reírse de eso. Sino a hacer humor desde ese punto de vista. Es humor con los fantasmas, no de los fantasmas.

Si fueses un fantasma, ¿serías de los molestos o de los melancólicos como el de 'Ghost'?

Te iba a decir que la primera no, pero la segunda me la has puesto fea también (risas). No sé, sería un fantasma que intentaría ayudar a los vivos, echar una mano en la oscuridad y la transparencia desde el más allá. Lo utilizaría para bien, no para fastidiar. Hombre, que a alguien igual le putearía algo… pues sí. Algún capullo, algún político, algún futbolista… Bueno, dejémoslo ahí que me empiezo a calentar (risas).

Y si pudieras conectar con alguien que se ha ido, ¿con quién te gustaría hablar y de qué?

Complicado. (Piensa) Por ejemplo… con el Che Guevara. Quedaría con él y hablaría un poco de su visión de la historia, del momento de entonces y del actual.

En 'Pagafantas' no había manera de que la chica te hiciese caso y aquí no te deja en paz, ¿ha mejorado tu vida sentimental en la pantalla o has ido de mal en peor?

He pasado de un extremo a otro. Soy radical (risas). Aquí es un poco lo contrario a ''Pagafantas'. Ella está insistiendo desde el mundo de los muertos, dándome el coñazo y aunque esté megaenamorado de ella intento mirar al futuro, porque cada vez puedo verla menos y estar menos con ella. Pero a la vez la quiero mucho. Ahí están los conflictos de esta película.

¿Te dan mucho la tabarra todavía con 'Pagafantas'?

Sí, la gente sigue viéndola. Porque la repiten en la tele, en los autobuses y los trenes. O, claramente, porque se la han bajado de Internet (risas). O se la pasan unos a otros. Creo que se vio más después de su paso por los cines que en las propias salas, donde funcionó bastante bien. Después con el boca a boca se ha seguido viendo. Hay gente que me la pide. Es como que todavía está viva y eso mola mucho. Estoy orgullosísimo de que sea mi primera película.

¿En qué andas metido ahora?

Acabo de rodar una película que se llama 'Lobos de Arga', una historia que mezcla terror, hombres lobo y comedia.

¿Sigues con la comedia entonces?

Sí, pero hay mucha acción, aventura y momentos de acojone, de mucho miedo, de terror, de pavor. La comedia no está en el chiste, sino en las situación tan extremas que viven los tres personajes protagonistas. Pero sí, hay un fondo de comedia. Como estas películas que hacen en Inglaterra y Estados Unidos en las que se mezclan las historias de terror bien hechas con hombres lobos y con momentos muy graciosos que funcionan bien. El guión está muy conseguido. También estoy grabando una serie para TVE que se llama 'Plaza de España'. Es una sitcom de 25-30 minutillos, una comedia pura. Muy divertida, leyendo los guiones nos descojonamos. Está ambientada en la Guerra Civil, en el año 36, en un pueblo y ocurre absolutamente de todo. Estoy encantado.

¿Para cuándo se estrena la serie?

Para finales de mayo, principios de junio. Se emitirán dos capítulos seguidos.