La ruptura es oficial: Harry y Meghan separan su oficina de William y Kate

  • Ambos ducados han decidido dividir sus casas de representación, según ha anunciado el Palacio de Kensington.
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EFE

Divorcio real. Una frase que tiene doble lectura, porque la separación entre los duques de Cambridge, William y Kate, y los de Sussex, Harry y Meghan es ya oficial. Ambos ducados han decidido separar sus oficinas de trabajo, que estaban agrupadas bajo el Palacio de Kensington, que también era su residencia. Ahora, ambas parejas caminarán en solitario en lo que respecta a sus actos y agenda de representación.

El propio Palacio se encargó de anunciarlo este jueves, una decisión que cobra todo el sentido cuando los duques de Sussex están a punto de mudarse. Porque Harry y Meghan querían tener su propia intimidad y hace unos meses decidieron marcharse a vivir a Frogmore Cottage, en Windsor, a una mansión cuyas obras están terminando y que habrían costado unos 5,5 millones.

Por ello, ahora los dos ducados se dividen en cuanto a la gestión de su día a día. Se trata de una decisión aprobada por la Reina Isabel y el príncipe Carlos, quienes tenían que dar el visto bueno a este 'divorcio'. Desde ahora, será el Palacio de Buckingham el que servirá de oficina para los duques de Cambridge, ya que William será rey algún día, mientras que a los duques de Sussex les seguirá apoyando el Palacio de Kensington hasta que tengan su propia oficina en Windsor esta primavera.

Nuevos e importantes asesores

En esta nueva andadura por separado, ambos ducados contarán con nuevo personal que les ayudará a realizar con mayor profesionalidad su labor institucional. Según recoge 'People', la casa real británica ha contratado a Jason Knauf como asesor principal de William y Kate, quien les asesorará en todo el ámbito de la solidaridad, el medio ambiente, la salud mental y la infancia. Este profesional hará una revisión completa a la estructura de iniciativas caritativas en las que participan los Cambridge para que sean más efectivas. Además, han fichado a Christian Jones  como secretario de comunicación.

Por su parte, Harry y Meghan también tienen un fichaje de altura en su nuevo equipo. Se trata de Sara Latham, ex asesora de Hillary Clinton en su campaña presidencial de 2016, quien se ocupará de la comunicación de la pareja y trabajará codo con codo con su homóloga para la Reina Isabel, lo que supone que ambos estarán muy ligados a las actividades de la soberana y a su forma de proceder.

De este modo, ambos ducados tendrán a partir de ahora funciones muy distintas y una forma de trabajo totalmente diferente, con agendas y asesores independientes. Según revelan fuentes de la casa real a 'People', la llegada de Meghan a los Windsor ha generado un cambio en la relación de la familia de "forma significativa", si bien consideran lógico que se haga esta separación para que los Sussex tengan más libertad de acción a la vista de su gran popularidad.

Además, señalan que Meghan tiene "una personalidad muy fuerte y las ideas muy claras", de ahí que le interese apoyar causas benéficas diferentes a las de sus cuñados. No obstante, es probable que mantengan la fundación conjunta que tienen ambos ducados que está dando muy buenos frutos. 

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