La Colección Obra Fundamental recupera a Elena Fortún y Matilde Ras

Madrid, 21 ene.- Bajo el título "El camino es nuestro", la Colección Obra Fundamental editada por la Fundación Banco Santander recupera la obra de Elena Fortún y Matilde Ras, dos escritoras y humanistas comprometidas con la mujer y la modernidad social de su época.

Pioneras en la defensa de los derechos de la mujer y en contra de las injusticias de su época, estas escritoras y periodistas pertenecieron a la primera generación de mujeres que se debatió entre las vanguardias, el feminismo y la tradición.

Con una antología de sus artículos, ensayos, diarios, cuentos y cartas, Nuria Capdevila-Argüelles, catedrática de la Universidad de Exeter y María Jesús Fraga, escritora, investigadora de la UCM y especialista en Elena Fortún, han sido las encargadas de prologar y compilar "El camino es nuestro".

Elena Fortún (Madrid,1886-1952) y Matilde Ras (Tarragona, 1881-1969) formaron parte de la primera generación de feministas españolas con conciencia de grupo; mujeres que vivieron entre la modernidad de las vanguardias y el peso de la tradición.

Amigas y admiradoras mutuas desde los tiempos del madrileño Círculo Sáfico de Victorina Durán, anterior a la Guerra Civil, el libro pretende glosar la figura de ambas escritoras, rescatar su obra literaria y humanística, y ahondar en las auténticas dimensiones de su relación amorosa, según Nuria Capdevila-Argüelles, para quien fue "un amor no exento de sombras, pero aun así excepcional y profundo".

Se trata de la primera ocasión en la que un solo volumen de la Obra Fundamental se dedica a recuperar la figura de dos mujeres, que no sólo compartieron una amistad amorosa, sino que también estuvieron comprometidas en la defensa de los derechos de la mujer y el feminismo.

En opinión de Javier Expósito, responsable de la Colección, "tuvieron una manera de entender el mundo y escribir sobre él integradora, espiritual y de modernidad y justicia social que ahora mismo resulta muy necesaria".

La amistad entre las dos escritoras comenzó con las colaboraciones que hicieron en Blanco y Negro, probablemente en los años veinte. Elena Fortún estuvo casada, aunque su marido se suicidó en Argentina y su hijo murió poco después, mientras que Matilde Ras no se casó ni tuvo hijos.

Fortún fue una excepcional periodista y escritora, no sólo de narrativa infantil, conocida por el eterno personaje de Celia, sino de temas espirituales, sociales y comprometidos con un ideal de justicia y regeneración conectado esencialmente con los principios de modernización de la Generación del 14.

Esta postura de regeneración que abarcaba lo femenino y el papel de la mujer en la sociedad como eje de su visión de la modernidad, fue la que sostuvo Elena Fortún en contra de la argumentación al discurso de figuras como Ramón y Cajal o Marañón y, posteriormente, la propia Pilar Primo de Rivera en el movimiento falangista.

Por su parte, Matilde Ras es considerada una especialista de renombre mundial en grafología y a pesar de ser polígrafa, traductora, especialista en el Quijote, ensayista y escritora de novela, teatro, guiones y artículos de prensa, no llegó a tener la notoriedad de Elena Fortún y murió en el olvido.

"Ellas son los grandes fantasmas de la modernidad española" en opinión de Nuria Capdevila, para quien "la sociología de nuestro siglo XX y la historia de la literatura no estarán completas hasta que no hayamos incorporado un saber profundo sobre nuestras modernas".