París, 4 oct.- La Ópera de París vive hoy una velada excepcional para despedir a Brigitte Lefèvre, su directora artística de la danza desde 1995, puesto clave que ocupó poco antes el legendario bailarín y coreógrafo ruso Rudolf Nureyef y cuya batuta tomará este mismo mes su colega francés Benjamin Millepied.
En honor de Lefèvre, actuará el Ballet de la Ópera de París que bajo su dirección se consolidó como uno de los mejores del mundo, y los alumnos de la Escuela donde ella misma comenzó a bailar a los ocho años, antes de actuar de 1969 a 1972 en la compañía que luego dirigiría.
Acompañado de la Orquesta de la Ópera, el espectáculo ofrecerá coreografías de William Forsythe, Ivan Clustine, Jacques Garnier y Harald Lander.
Se cerrará con el "Desfile del Ballet", impresionante creación de Serge Lifar estrenada en 1946 sobre la música de la marcha de la ópera "Les Troyens", de Hector Berlioz, presentada como algo "único en el mundo".
La velada tendrá lugar en el Palacio Garnier, sala histórica de la institución inaugurada a mediados del siglo XIX, que se completó desde 1989 con una segunda y también monumental sede, de mayores dimensiones, en la plaza de la Bastilla.
Entre las múltiples responsabilidades manejadas por Lefèvre en estas dos décadas, figuró la de acompañar a sus bailarines estrella a lo largo de su carrera, en particular en la vía que lleva de la interpretación a la creación, como fue el caso de José Martínez, actual director de la Compañía Nacional de Danza española (CND).
Otras figuras que bajo su mando interpretaron los más grandes papeles y comenzaron a montar y dirigir sus primeras coreografías y ballets fueron Kader Belarbi, Jean-Guillaume Bart, Marie-Agnès Gillot y Nicolas Le Riche, mientras que Agnès Letestu se inició en en el mundo del vestuario artístico y la costura.
Antes de tomar las riendas del Ballet y de su programación, Lefèvre fue administradora general de Garnier, de 1992 a 1995.
Sin abandonar la danza, se introdujo antes en el mundo del teatro y fundó en 1972 con su amigo Jacques Garnier el Teatro del Silencio, donde colaboró hasta 1985, hasta que comenzó a trabajar en el Ministerio de Cultura como inspectora general y luego delegada para la Danza.
En la Ópera de París, Lefèvre construyó un repertorio clásico y contemporáneo de primer nivel, en el que dio un lugar importante a las producciones de Nureyef, su antecesor de 1983 hasta su muerte, en 1993.
Con ella entraron en el repertorio piezas fundamentales como "Le Sacre du printemps" y "Orphée et Eurydice" de Pina Bausch. La primera en 1997 y la segunda en 2005.
Bajo su manto, trabajaron igualmente para la institución otras celebridades internacionales como Maurice Béjart, Trisha Brown, Mats Ek, Jirí Kylián, Wayne McGregor, John Neumeier, Robyn Orlin, Roland Petit, Angelin Preljocaj, Saburo Teshigawara, Sasha Waltz o los españoles Blanca Li y José Montalvo.
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