Eduardo Mendoza ve el Premio Cervantes a autores catalanes "dentro de la normalidad"

El escritor Eduardo Mendoza, que ha ganado este miércoles el Premio Cervantes 2016, ha asegurado que "entra dentro de la normalidad" que este galardón, considerado el Nobel de las letras españolas, se conceda a autores catalanes.

Preguntado sobre este extremo en declaraciones a Europa Press, el escritor ha dicho desde Londres que "hay tantos precedentes de escritores catalanes que ya han recibido este premio, que entra dentro de la normalidad", citando, por ejemplo, los galardones a Juan Marsé, Ana María Matute y Juan Goytisolo.

Sobre las palabras que pronunciará en el discurso de concesión del Premio, el domingo 23 de abril de 2017, ha asegurado que todavía no lo ha pensado: "No he tenido tiempo de pensar esto ni nada más, porque este premio ha venido en cascada".

A tenor de sus declaraciones al recibir el premio, que ha considerado un final de trayecto, Mendoza ha esgrimido que "todo el mundo se lo está tomando a la tremenda como si fuera el entierro de la sardina".

Ha explicado haber afirmado que empezó recibiendo un premio con su primera novela, que le puso en órbita, y ahora hacia el final de su trayectoria ha recibido este premio tan importante y solemne: "Hay cierta simetría pero no significa que vaya a estirar la pata esta noche".

Mendoza ha subrayado que con estas palabras se refería a que antes de recibir el primer premio escribió muchísimo: "Y después de recibir el último seguiré escribiendo".

"VOY ESCRIBIENDO"

De hecho, el autor sigue escribiendo: "Voy escribiendo, es lo importante", aunque también ha admitido que escribe páginas que, en sus palabras, alimentan la caldera de la calefacción.

Sobre la importancia para el jurado del premio de 'La verdad sobre el caso Savolta' como novela que significó una nueva etapa en la historia de la narrativa española, Mendoza ha celebrado que le colocó inmediatamente en la esfera pública, "pasando de cero a titular del equipo".

"Es verdad que supuso un cambio, pero el cambio ya estaba. Era generacional: de planteamientos y estético, y yo fui uno de los que participó", ha explicado, defendiendo que no fue ni el primero ni el más importante.