El día del español: los escritores eligen su palabra favorita, ¿cuál es la tuya?

  • Hoy es el Día E, el día nuestro idioma. Para celebrarlo, hemos hablado con varios escritores hispanohablantes preguntándoles por su palabra preferida en español. Y la tuya, ¿cuál es?

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María Dueñas, autora de 'El tiempo entre costuras'

El español es una de las lenguas más habladas a lo largo y ancho del mundo: casi 500 millones avalan ese hecho. Como cualquier otro idioma, está lleno de miles de palabras, muchas de ellas sinónimas o de significado muy similar. Pero no todas suenan igual al oído: hay palabras retumbantes, chisporroteantes, crujientes, ásperas, suaves o cálidas. Cada persona tiene su palabra favorita. Y los escritores también.

Para gustos, las palabras. Por eso, y con motivo de la celebración del Día E este sábado, nos preguntamos, ¿cuáles son las palabras preferidas por los hispanohablantes? Los escritores lo tienen claro: estas son sus palabras.

1. José María Merino: "Melancolía"

Autor de obras como La Sima o El Heredero, José María Merino se queda con la palabra "melancolía". "Tiene unas resonancias de memoria, de extraña pesadumbre y al mismo tiempo no exactamente negativa", explica el escritor leonés, que añade: "Está llena de elementos que cuentan con el tiempo y con el sentimiento".

2. Fernando Iwasaki: "Constante"

Historiador, docente y escritor, el peruano Fernando Iwasaki elige la palabra "constante", porque "significa luminoso, brillante". "Lo dice de una manera que a mí particularmente me gusta", puntualiza Iwasaki, que presentó el mes pasado en La Rioja Una declaración de humor, donde se reúnen artículos en los que habla de política, amor y vida cotidiana.

3. María Dueñas: "Alegría"

La autora de El tiempo entre costuras, María Dueñas, elige una palabra positiva: "alegría". Pero no solo lo hace por su significado, sino también por su sonoridad y "por su esperanzador efecto contagioso". Como su novela, que ha contagiado mucho: ya se han vendido casi un millón de copias.

4. Fernando Royuela: "Grúa"

A Fernando Royuela le encanta la palabra "grúa", por su "belleza paisajística". "Se pronuncia con la lengua y sale recia de la boca como si edificada con ladrillos", matiza el autor de La pasión segun las fieras. Y sobre la tilde del diptongo, explica: "Es un andamio necesario que acentúa la efímera riqueza del país. Decimos grúa y nos imaginamos una vasta inmensidad de terrenos recalificados listos para construir".

Pero el significado de grúa para Royuela no se queda ahí. "Nos habla de la especulación inmobiliaria, del dinero negro que crece como la espuma, de los políticos corruptos que babean comisiones y de la rapiña sistemática del litoral". De hecho, si hubiera que inventar de nuevo España, él propone llamarla grúa, y "hacer banderas con grúas y adoptar la grúa como moneda única". "Así, con una simple palabra, seríamos felices otra vez", concluye.

5. Serafín Fanjul: "Cántaro"

Serafín Fanjul, que acaba de dar a luz a Buscando a Carmen, elige cántaro "por su eufonía y por ser de barro, de tierra; porque se cuece con fuego y por añadidura sirve para contener y distribuir agua, fuente de la vida". Para Fanjul, cántaro integra "tres de los elementos básicos del cosmos" (tierra, fuego y agua).

Y para este filólogo especializado en lenguas semíticas, este término "no es solo una evocación libresca", ya que en la casa del pueblo traía, almacenaba y bebía el agua valiéndose de "cántaros de verdad, no de folklore ni de adorno".

6. Moncho Alpuente: "Nada"

El escritor y cantante Moncho Alpuente elige "nada", porque "nada es todo". "Es una palabra muy simple porque al revés se dice Adán, y parece que es también una manera de indicarnos cuál es la condición humana", explica. Pero tiene dos motivos más para elegir nada: por un lado, significa nadar, "ir por el agua", y al mismo tiempo, Adán y Eva son los primeros hombres, y "Eva al revés es Ave". "Me parece bastante poético", comenta.

Pero el autor de Un maldito enredo también tiene una palabra maldita. "Una de las palabras que más odio es todo, todo lo que es totalitario, enorme".

7. Agustín Fernández Mallo: "Crepúsculo"

Al físico y escritor Agustín Fernández Mallo le gusta mucho la palabra "crepúsculo", porque "tiene resonancias de muchas cosas y momentos". "Indica que algo se acaba pero también suena a crepitar, al fuego, algo que se purifica y comienza", añade el autor de, entre otros, El hacedor (de Borges), Remake.

Asimismo, crepúsculo no es una palabra extraña, pero "tampoco es muy usada". "Eso la hace atractiva desde el punto de vista de crear una situación o atmósfera determinada en un relato o poema", comenta.

8. Manuel Vilas. "Amor"

El autor de Los inmortales elige "amor"."En ella está todo lo que vale la pena. Fuera de ella no hay nada", explica este narrador, que también es poeta y Amor es precisamente el título de su poesía completa. "Si estás dentro de esa palabra, tu vida es grande", afirma, y añade: "Es la palabra más poderosa del universo". Como bien dijo Luis Cernuda, el amor es la "única luz del mundo", algo con lo que está muy de acuerdo.

9. Carlos Fernández Liria: "Anticapitalista"

Para Carlos Fernández Liria, que se presentó a las elecciones al Parlamento Europeo en 2009 con el partido Izquierda Anticapitalisata, su palabra preferida, es precisamente "anticapitalista". "En ella tengo depositadas todas mis esperanzas, para mí y para mis hijos", dice Fernández Liria.

Según el autor de El materialista, "trescientos años de capitalismo han convertido este planeta en un basurero ecológico, social y moral". "Si esto dura treinta años más, el planeta reventará. Y la dignidad humana también", puntualiza.

10. Luis Alegre Zahonero: "Indignación"

Luis Alegre Zahonero, que tiene muchas publicaciones junto a Fernández Liria, elige una palabra que "expresa un contenido pasional intenso". Se trata de "indignación", que "al mismo tiempo es una palabra en la que resuena con fuerza un orden de razones a la base".

11. Aníbal Malvar: "Cronopio"

Otros autores eligen palabras que no están en el diccionario, com Aníbal Malvar, que presentará en la Semana Negra de Gijón su última novela, La balada de los miserables. La palabra preferida de este periodista y escritor es "cronopio", y no la elige por homenajear a Julio Cortázar, que escribió Historias de cronopios y de famas, sino porque "es una palabra no prisionera en la RAE, porque es español de América y no tiene definición, como amante transparente y desnombrante que nunca volverá a tu sábana".

Amante de los neologismos porque "hablan de la libertad del español y de su flexibilidad", Malvar explica que cronopio es "una palabra libérgica, como el ser que la almazara". Espera que "nunca la enladrillen en el diccionario, porque entonces todos los cronopios se pondrán paralelepípedos y de color carambola y morirán".

12. Javier Sierra: "Sigilo"

El escritor de El Ángel perdido, Javier Sierra, se queda con "sigilo". "Es una actitud que implica cautela, silencio y prudencia", añade. Pero para entender mejor la palabra, este periodista dice que buscarlo en su etimología, la palabra latina es sigillum, sello. Es una palabra que le trae a la mente "esos sellos de lacre que garantizaban la inviolabilidad de un secreto", que tarde o temprano "seremos capaces de abrir".

13. Marcos Roitman: "¡Ni modo!"

Una expresión que utiliza mucho el escritor y profesor Marcos Roitman es "¡ni modo!", que tiene un sentido polifacético. Por un lado, "responde a la expresión típicamente mexicana para indicar lo inevitable de una situación o circunstancia inevitable". Además, "casi siempre acompaña al fin de un diálogo o conversación en el cual se expresa el grado de aceptación de lo dicho, eso sí, anunciando cierto grado de frustración".

Y tú, ¿con cuál de todas te quedas? ¿Cuál es tu palabra favorita?

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