Londres expone esculturas en acero y alabastro y obra en papel de Chillida

Londres, 4 jun.- Esculturas en acero y alabastro y trabajos sobre papel de Eduardo Chillida, con "la obra pública" como temática, se exponen al público desde mañana en la galería privada londinense Ordovás, en la primera muestra monográfica de este artista en la capital británica en casi 20 años.

"Entre el hierro y la luz" da nombre a la pequeña pero cuidada selección de 27 obras escultóricas y en papel extraídas del archivo del prolífico artista vasco (1924-2002), uno de los pioneros de la escultura moderna.

El hijo mayor del escultor, Ignacio Chillida, explicó hoy a Efe en la presentación a la prensa cómo los trabajos escogidos -siete esculturas y 20 obras en papel- tocan un tema recurrente en la carrera de su padre, "que es el interés por la obra pública en general, la obra de una cierta escala".

Con más de 47 esculturas públicas instaladas por todo el mundo, a lo largo de 50 años Chillida dejó un extenso legado artístico que, ahora, "se está abriendo otros caminos en países asiáticos, como Corea o Suramérica", según explicó Ignacio Chillida.

Sobre su padre, uno de los escultores españoles internacionalmente más reconocidos y admirados, destaca que fue "un hombre muy impresionante como escultor, desde luego, y como artista y como persona y, de alguna manera, todo eso se refleja en su obra".

Las obras en hierro expuestas hasta el 27 de julio en Ordovás son "Basoa IV" (1990), hecha en acero y con 108 centímetros de altura; "Begirari III", de 96,5 centímetros y de 1994; "Idea para un monumento II", de 50 centímetros y también de 1994; y "En el límite I", con una altura de 37 centímetros, de 1995.

En otra sala se exhiben tres obras en alabastro, un material por el que Chillida sentía predilección para sus esculturas en piedra, y obras sobre papel.

Pese al lapso de casi dos décadas transcurrido para que se celebre un monográfico sobre el artista vasco en Londres, su hijo mayor observó que "realmente, todo aquel que conoce el mundo del arte sabe muy bien quién es Chillida".

Por su parte, Pilar Ordovás, la dueña de esta galería privada, consideró "un sueño hecho realidad poder enseñar la obra escultórica de Chillida en Londres".

Según esta experta, "el interés por su trabajo no solo está creciendo, sino que cada vez es más global".

En su extraordinario legado artístico, destaca el homenaje de Chillida a la reunificación alemana, con "Berlín" (1999), dos colosales estructuras de hierro ubicadas delante de la nueva Cancillería de ese país.

También "Peine del Viento XV" (1977), tres piezas gigantes de acero que se extienden desde los acantilados de San Sebastián y representan la relación del ser humano con la naturaleza.