Los juegos para Wii no combaten el sobrepeso infantil

Los sensores de movimiento llegaron para quedarse y con ellos la idea de que resultaban beneficiosos a cuantos niños y adolescentes con sobrepeso habían pasado sus últimos años atiborrándose de ganchitos mando en ristre. Un estudio del Bachelor College of Medicine de Houston (Texas), viene a demostrar justo lo contrario: los videojuegos controlados por movimiento no implican necesariamente la pérdida de peso y por consiguiente no han de entenderse un sustitutivo de la actividad física.La evidencia resultó de un experimento en que 78 niños pasaron 60 minutos diarios jugando con Wii. La mitad de los participantes lo hicieron con títulos de carácter activo (Wii Sports o Dance Dance Revolution, a su elección), mientras que el resto se dedicó a juegos pasivos (Disney Sing-it Pop Hits o Super Mario Galaxy).Todos los niños, entre 9 y 12 años, se encontraban por encima de su peso ideal. Transcurridas 13 semanas, quienes se encomendaron a los controles por movimiento no manifestaron pérdida significativa de peso. Los sujetos se equiparon con un cinturón provisto de acelerómetros, los cuales midieron sus minutos de actividad física frente a la consola. El grupo activo registró una media de 25 a 28 minutos por día, cifra ligera e inesperadamente superada por el otro grupo (26 a 29 minutos)."Esperábamos que esta clase de videojuegos incrementara la actividad física de los niños. Quedamos estupefactos al comprobar que apenas había diferencia.", dice Tom Baranowski, responsable del estudio.La explicación hay que buscarla en los patrones de movimiento requeridos por estos juegos, inequivalentes a los que ejecutamos en la vida real al nadar, boxear o correr, por ejemplo. Dicho de otro modo, un ejercicio resulta del todo ineficaz si no se realiza correctamente.