Nacho Ares recrea en "La tumba perdida" la historia de Tutankamon y Carter

  • El egiptólogo leonés Nacho Ares recrea en su última novela, "La tumba perdida", la historia paralela entre la vida del faraón Tutankamon en el siglo XIV a.C. y el hallazgo de su tumba por Howard Carter en los años veinte del siglo XX.

Barcelona, 24 ene.- El egiptólogo leonés Nacho Ares recrea en su última novela, "La tumba perdida", la historia paralela entre la vida del faraón Tutankamon en el siglo XIV a.C. y el hallazgo de su tumba por Howard Carter en los años veinte del siglo XX.

En la presentación de la novela, que Ares ha realizado en el Museo Egipcio de Barcelona, rodeado por algunas figuras emblemáticas de ambos momentos históricos, el autor ha confesado que "La tumba perdida" (Grijalbo) pretende ser "un homenaje al 90 aniversario del descubrimiento de la tumba".

En la novela, ha dicho, "se entrelazan dos historias, una relatada en la época faraónica y otra, la de Howard Carter, a principios del siglo XX, aunque -advierte- no es una novela sobre el descubrimiento de la tumba, sino que comienza justo después del hallazgo".

Recuerda Ares, actual director de la Revista de Arqueología, que "no sólo fue singular el hallazgo de la tumba de Tutankamon en 1922, sino que también sorprende la propia intrahistoria del descubrimiento, casi propio de una novela policíaca, y la propia leyenda negra que rodeó a sus protagonistas".

La novela arranca en la casa de Howard Carter en Luxor, donde Carter, que acaba de deslumbrar al mundo con la excavación de la tumba casi intacta de Tutankamon, "está inmerso en su próxima pesquisa: una tumba que los antiguos consideraron 'maldita', una tumba perdida cuya ubicación en el Valle de los Reyes está escondida entre los jeroglíficos de un ostracon".

En este punto, Ares exhibe una réplica del ostracon número J72460, una placa de cerámica rota utilizada como soporte de la escritura, que revela la ubicación de diferentes tumbas.

A partir de aquí, Ares imagina el robo de esta preciada pieza y los intentos de Carter por proseguir con su búsqueda.

El autor ficciona la historia a partir de personajes reales como la hija de Lord Carnarvon, el mecenas de Carter, que es víctima de un intento de envenenamiento, y el gobernador local de Luxor.

El hallazgo de la tumba de Tutankamon, cerca de la tumba de Tutmosis IV, sirve a Ares de excusa literaria para hablar de una tumba desconocida en el Valle de los Reyes, pero también para "recrear la cara más negra de la edad de oro de la egiptología, con las rivalidades entre arqueólogos franceses y británicos, el expolio, el tráfico de antigüedades, las tensiones nacionalistas y la corrupción de las autoridades en un recién independizado Egipto".

"Siempre había querido escribir una novela sobre Carter, el principal culpable de que me dedicara a la egiptología", ha confesado Ares, quien revela que los diálogos son inventados aunque las situaciones son reales.-

Mostrar comentarios