Purificación García pide a los empresarios que apuesten por la moda española

Oviedo, 16 ene.- La diseñadora Purificación García ha instado hoy a los empresarios e industriales a que apuesten "un poco más" por la moda española.

Purificación García, que ha participado hoy en Oviedo en el cuarto encuentro de "La Cultura del Siglo XXI" organizado por el Centro de Formación y Producción Audiovisual (GONNA), ha reconocido que es "muy difícil encajar el matrimonio entre un industrial, que quiere resultados, con un diseñador, que en general tiene escasez de humildad y un ego muy subido".

En este sentido, el presidente honorífico de Loewe, Enrique Loewe, ha recalcado que en España "no hay empresarios de moda" y los diseñadores están mal formados.

En cambio, ha resaltado que desde hace años las cosas se están haciendo mejor en España gracias a una "mejora educacional" que ha generado "otro despertar hacia una realidad empresarial que es muy compleja".

"Hay que entender que la moda no es un decisión que toman los dioses para bendecir a alguien sino un negocio que hay que hacerlo competitivo en el mundo actual", ha subrayado.

Loewe ha destacado el discurso de los responsables del nuevo Gobierno al decir que hay que apoyar a los sectores pero que la "cultura de la subvención tiene que acabarse".

"La gente debe resolver y competir sin que venga papá Estado para resolverlo todo", ha reseñado Loewe, que ha afirmado que cuando España lo consiga se podrá contar con personas "más capaces y luchadoras, evitar corrupciones y construir una economía y una sociedad más sana".

Al respecto, Purificación García ha afirmado que parecía que los Ejecutivos españoles iban a hacer "grandes cosas por los jóvenes diseñadores y, en cambio, el país se encuentra en un momento de estancamiento", mientras que los franceses e italianos reciben "grandes ayudas a nivel estatal".

Por otra parte, Loewe ha rechazado la acepción que se le da a la palabra lujo por parte de la Real Academia de la Lengua, ya que, a su juicio, la definición de "superfluo, inútil o absurdo" es "una etiqueta" que no le corresponde.

"Pertenezco a una empresa artesana que ha valorado un material fantástica como la piel, que ha formado a artesanos y ha buscado en el diseño la calidad, la belleza para hacer objetos que sean compatibles con la vida cotidiana", ha recalcado.

Ha indicado que a un diseño de Loewe le pediría que "fuera honesto, verdadero, artesanal, que esté hecho con dignidad", pero, en cambio, ha dicho que ahora "el mundo está acostumbrado a saber lo que valen las cosas y no lo que en realidad son las cosas".