Sergio Vegas sigue grave pero responde bien a las curas ya en planta

Valladolid.- El rejoneador Sergio Vegas, cogido de extrema gravedad el pasado domingo en la plaza de toros de Granada por un toro en puntas de la ganadería de Partido de Resina, evoluciona satisfactoriamente en una habitación del Hospital Universitario Virgen de las Nieves (antes Ruiz de Alda).

"Ha pasado buena noche y ahora le están curando, pero es que la cornada ha sido muy fuerte. A nada que le hubiera rozado el corazón no estaría ya con nosotros. De un millón, se salva uno y ése ha sido mi hijo, nos ha dicho el médico", ha explicado esta mañana a Efe el ganadero Eladio Vegas, padre del jinete herido.

El toro, de gran trapío y con las defensas intactas, resultó muy agresivo y peligroso: "salió parado y de repente pegaba arreones sin ton ni son, pero lo importante es que mi hijo se ha salvado porque no contábamos con ello", ha añadido.

Sergio Vegas ha abandonado ya la Unidad de Cuidados Intensivos del centro hospitalario, situado a muy corta distancia de la plaza monumental de Granada, donde continuará varios días más en un postoperatorio que se presume largo por la gravedad de las heridas causadas en el pecho por una cornada de veinticinco centímetros y dos trayectorias.

"Se encuentra con muchas ganas e ilusión de salir adelante y poder entrenar otra vez", ha explicado Eladio Vegas, quien ha aconsejado ya a su hijo que no vuelva a matar toros pie a tierra, que prepare un caballo para materializar la suerte desde la montura con el rejón de muerte: "lo tengo más claro que el agua".

Sergio Vegas había matado ya este invierno, a puerta cerrada y al volapié, varios toros como entrenamiento para esta gesta, algunos con el mismo hierro de Partido de Resina (antes Pablo Romero) que le hirió de extrema gravedad.

"Lo tenía todo muy practicado. Ha pasado y ya está. No vale ahora echar la culpa a nada ni a nadie. Lo importante es que Sergio sigue con nosotros", ha concluido.