Tarde triunfal en A Coruña con Ventura, Fandi y Fandiño, a hombros

  • El rejoneador Diego Ventura y los diestros David Fandila "El Fandi" e Iván Fandiño salieron hoy a hombros del Coliseum de A Coruña tras repartirse un total de ocho orejas.

A Coruña (España), 4 oct .- El rejoneador Diego Ventura y los diestros David Fandila "El Fandi" e Iván Fandiño salieron hoy a hombros del Coliseum de A Coruña tras repartirse un total de ocho orejas.

FICHA DEL FESTEJO: Dos toros para rejones de San Mateo, colaboradores, y cuatro en lidia ordinaria: dos -segundo y quinto- de Olga Jiménez, uno -el tercero- de Peña de Francia y otro -el sexto- de Hermanos García Jiménez, aceptables de presencia y de buen juego en conjunto.

El rejoneador Diego Ventura, oreja y dos orejas.

David Fandila "El Fandi", oreja y dos orejas.

Iván Fandiño, oreja y oreja

La plaza tuvo alrededor de media entrada.

-------------------------

A CORUÑA QUIERE TOROS

El Fandi sorteó en primer lugar un buen toro de Olga Jiménez, con el que mostró su habitual espectáculo, es decir, variedad de capa, facultades y transmisión en banderillas, y mucha entrega en la muleta, lo que le valió para cortar una oreja.

En el quinto vino el lío gordo del granadino, todoterreno en todos los tercios en una faena que entusiasmó al coliseo coruñés, que acabaron rendidos al espectáculo "made in" Fandi. Dos orejas.

Fandiño tuvo que vérselas en primer lugar con un astado tan noble como justo de fuerzas, con el que anduvo solvente y muy capaz en una faena premiada con un trofeo.

Remató el triunfo Fandiño en el sexto con una importante faena al natural, premiada únicamente con una oreja por no matar con mayor contundencia.

Diego Ventura aprovechó la bondad del toro que abrió plaza para ofrecer un vibrante espectáculo de toreo a caballo, lo que le hizo cortar un apéndice tras una labor de notable calado.

El cuarto fue otro toro de notable condición con el que Ventura hizo las delicias del tendido coruñés con una faena vibrante y espectacular a la vez que pulcra, y muy bien rematada en la suerte suprema. Dos orejas sin discusión.

Mostrar comentarios