Trucos de ahorro para no derrochar en rebajas: cómo no gastar más de la cuenta

Las rebajas ya inundan las tiendas. Aunque la mayoría de comercios lleva ya varias semanas con descuentos, será el viernes 29 de junio cuando alcancen todo su esplendor con la incorporación de las tiendas del grupo Inditex (Zara, Bershka, Stradivarius, Pull&Bear...) y El Corte Inglés. Por ello, se espera que en los próximos días los comercios revivan tras la mala campaña de primavera gracias a los descuentos que siempre logran atraer al público.

Para esta campaña de rebajas de verano, se espera que el 62% de los españoles compre algo, según el comparador online Acierto.com, por lo que muchas personas harán un desembolso estos días. Un gasto que en algunos casos se va más de la cuenta, algo bastante peligroso en pleno verano con las vacaciones a la vuelta de la esquina.

Si bien hay una serie de trucos o formas de evitar que la tentación de las rebajas caiga completamente sobre nosotros. Se trata de dar unos simples pasos para que las rebajas se ciñan a lo que realmente necesitamos y no quememos la tarjeta sin darnos cuenta.

En primer lugar, y algo en lo que la mayoría de organizaciones y asociaciones de consumidores está de acuerdo, lo más importante es hacer una lista de lo que se necesita. Por ejemplo, en el 'Decálogo del bueno comprador en rebajas' de la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) elaborar una lista está en primer lugar, ya que permitirá dejar claras las prioridades e ir a lo seguro.

Otra opción importante es determinar una cantidad límite para gastar. Para ello conviene hacer una especie de presupuesto mensual para saber cuánta cantidad se puede gastar en rebajas sin que ello suponga un perjuicio para la economía doméstica. Una vez se determine esa cantidad, es importante no excederse de ella porque de ello puede depender acabar el mes de forma desahogada o con apuros.

Una vez determinado el dinero que tenemos disponible y los productos que nos hacen falta, es momento de buscar el mejor descuento. Porque no es cuestión de coger lo primero que se encuentre, sino de esforzarse un poco para así conseguir realmente ahorrar con las rebajas. Esto implica realizar diferentes búsquedas por los diferentes comercios para dar con la mejor rebaja.

Algo que ahora facilita mucho Internet, pues se pueden hacer las búsquedas a través de los portales online de las tiendas sin necesidad de salir de casa. Además, la comunidad internauta también puede ayudarnos, pues existen muchos foros y grupos en los que se comentan los productos, se cuelgan 'chollos' o se dan opciones para encontrar artículos a buen precio.

Igualmente, las nuevas tecnologías facilitan ese objetivo de ahorro, pues gracias a las aplicaciones móvil que permiten controlar nuestros gastos podemos tener todo controlado con solo un click y crear alertas para que el teléfono nos avise cuando lleguemos a nuestro límite de gasto establecido.

Por último, si vamos a ir de rebajas al modo tradicional recorriendo las tiendas, es imprescindible prepararse antes de salir de casa. Y una de las cosas fundamentales para evitar el derroche es dejar la tarjeta de crédito en casa. Aunque llevar dinero en efectivo sea algo que cada vez hacemos menos, en rebajas conviene hacer el esfuerzo, porque si llevamos la cantidad justa que podemos gastar no habrá posibilidad de pasarse.

La tarjeta es el mayor peligro que podemos llevar entre manos, porque al no ver físicamente lo que estamos gastando tenemos la idea de que realmente no lo hacemos, y tiramos de ella sin tener en cuenta que a final de mes puede tener nefastas consecuencias. 

También es recomendable acudir solos de compras. De este modo, no tendremos el estímulo externo de nuestros familiares y amigos que siempre suelen animarnos a cogernos "esa blusa tan ideal" -que luego nunca te pondrás- o los "maravillosos zapatos" -que serás incapaz de aguantar más de media hora seguida-.