Barcelona.- Unas cinematográficas y naturalistas "Cavalleria rusticana", de Pietro Mascagni, y "Pagliacci", de Ruggero Leoncavallo, se podrán ver a partir del viernes en el Gran Teatro del Liceo, bajo la dirección de escena de la italiana Liliana Cavani, autora de filmes como "Portero de noche" y "La piel".
El director artístico del Liceo, Joan Matabosch, recordaba hoy en rueda de prensa que este díptico operístico, formado por dos de los títulos más populares del repertorio, hace 23 años que no se representaban conjuntamente en Barcelona.
En esta ocasión, las funciones se dedicarán a Jaume Aragall, cuando se cumplen cincuenta años de su debut como el Beppe de "Pagliacci".
Coproducidos por los teatros de Bolonia y Catania, estos montajes, según ha comentado hoy su responsable, Marina Bianchi, son "muy cinematográficos" y Cavani ha tenido especial cuidado en resaltar todos los pequeños detalles que envuelven las diferentes historias para dar "un mayor verismo".
De la "Cavalleria rusticana" ha indicado que tiene un aire de "neorrealismo italiano", mientras que la obra de Leoncavallo remite a los viejos filmes de Federico Fellini.
No ha obviado que el trabajo que se ha llevado a cabo hasta su puesta en escena ha sido duro y cansado pero tanto ella como Liliana Cavani están muy "satisfechas por el resultado final" y han cuidado mucho la adaptación de cada uno de los intérpretes a sus respectivos personajes.
Situada en un pueblo de Sicilia, "Cavalleria rusticana" (1890) es un melodrama de un acto, con las costumbres sicilianas muy en primer plano y que se considera la primera ópera del verismo musical italiano.
"Pagliacci" (1892) es un drama, que también sigue los principios de la nueva escuela "verista", basado en un hecho real, el asesinato por celos perpetrado por un saltimbanqui.
El director musical Daniele Callegari ha considerado que es muy pertinente que ambas óperas se presenten en una misma función por ser hijas de una misma época, alternativas a lo que creaba Verdi, y por haber contribuido indirectamente a la unificación de Italia gracias a una "música, que actúa como vehículo de transmisión".
Por otra parte, ha hecho hincapié en que hasta que no llegó a los escenarios la "Cavalleria", los personajes principales de las óperas pertenecían a la nobleza, a la aristocracia o al mundo de los mitos, mientras que gracias a esta representación "los protagonistas fueron reales, del pueblo".
Sobre la orquesta, Callegari ha sostenido que se utiliza como sosten de la dramaturgia y ha destacado el papel del coro, que también es como otro personaje de la acción.
El tenor José Cura, que en algunas de las funciones será el Turiddu de "Cavalleria rusticana" y el Canio de "Pagliacci", ha mantenido que representarlas supone para los cantantes "una noche larga y difícil", pero "también es muy interesante".
El mayor problema, a su juicio, es que en la primera ópera el personaje que interpreta tiene apenas veinte años y miedo a morir, mientras que en el segundo es ya un viejo de 60 años, al que el mundo le cae encima. "Ese salto -ha proseguido- es lo más difícil, además de todo lo que atañe a la cuestión vocal".
Otro de los tenores que participarán en el reparto es el siciliano Marcello Giordani, que también será Turiddu y Canio, y que estrenándose en estos papeles ha dejado claro que por sus características, su interpretación será muy diferente de la que haga Cura.
La española Ángeles Blancas, en el papel de Nedda de "Pagliacci", cree que los artífices de los dos montajes han conseguido "una puesta en escena muy sincera y realista, en la que la música es un vínculo perfecto".
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