Aldama ha dado a conocer las propuestas del PSOE en materia sanitaria, junto al Hospital General de La Rioja, acompañado de dirigentes socialistas. Ha abogado por "reconocer la sanidad como un derecho para que aparezca en la Constitución al mismo nivel que la educación", al mismo tiempo que ha apostado por "hacerla sostenible", por lo que "queremos revertir los recortes del PP, con más aportación de recursos públicos y mayor eficiencia".
Además, el cabeza de lista al Senado ha apuntado que su partido quiere "cambiar el modelo asistencial por uno preventivo, por lo que hay que fortalecer la atención primaria". También ha señalado que para las reformas se quiere contar con todos los profesionales sanitarios.
MISILES CONTRA LA SANIDAD
Todo ello, porque ha señalado que "cuando hablamos de sanidad, hablamos de la joya de la corona del Estado del Bienestar, algo que tiene que ver mucho, con la gestión del Gobierno socialista". En este punto, ha recordado que en 1986 "un ministro, después asesinado por ETA, Ernest Lluch, aprobó la Ley General de Salud, que establecía la creación del Sistema Nacional de Salud".
Desde entonces, en España "hasta que ha llegado Rajoy hemos tenido una sanidad pública, universal, gratuita para el usuario, de calidad y sostenible". Con el PP "han sido cuatro años nefastos, porque poco a poco ha ido enviando misiles y deshojando los calificativos antes mencionado".
De hecho, ha asegurado Martínez-Aldama la sanidad "ahora no es universal, ya que un Decreto sacó fuera del sistema a 800.000 personas", así como "se ha resentido la calidad por culpa de los recortes, expulsando solo en el caso de La Rioja a 200 profesionales". A ello, ha unido que las listas de espera "han crecido un 30 por ciento" y la "ralentización de inversiones en nuevas tecnologías, y abandono la investigación".
Para el cabeza de lista a la Cámara Alta "ha sido grave" también, la puesta en marcha del "copago", además de los 500 medicamentos que "antes eran gratuitos y ahora tienen que pagar". Además, "se ha emprendido un camino hacia la privatización para trasferir recursos públicos a empresas privadas, principalmente amigas o vinculadas al PP".
Finalmente, Martínez-Aldama ha lamentado que La Rioja "no ha sido ajeno a ello", ya que además de los 200 profesionales "perdidos en materia sanitaria", ha unido el "recorte de 50 millones de euros en el gasto sanitario, pero ha crecido en 15 millones de euros lo que el Gobierno transfiera las empresas privadas".
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