En nota de prensa, el Principado indica que este nivel, de bajo riesgo, establece que es preciso informar a la población sobre la conveniencia de protegerse frente a las radiaciones solares y las elevadas temperaturas, así como de la necesidad de mantenerse hidratados y evitar el consumo de bebidas alcohólicas. También se subraya la conveniencia de mantener en frío los alimentos, ya que con el calor aumenta el riesgo de brotes alimentarios.
El plan se activa todos los veranos entre los meses de junio y septiembre e incluye, entre otras medidas, la publicación de un informe semanal de la situación de riesgo en el portal web de la Consejería de Sanidad (www.astursalud.es).
El objetivo es disminuir la morbilidad y la mortalidad asociada a temperaturas elevadas, ya que se ha observado que los periodos de tres o más días consecutivos de temperaturas altas y no habituales pueden ir acompañados de un incremento en esas cifras. El proyecto, que estará vigente hasta el 15 de septiembre, incluye la monitorización de las temperaturas y las previsiones meteorológicas con cinco días de antelación; la monitorización de la mortalidad del periodo de estudio; y la publicación de un informe semanal con las predicciones en la web www.astursalud.es, dentro de la información sobre el Plan de prevención de los efectos de altas temperaturas 2017
Los umbrales de temperaturas establecidos para este año en Asturias se sitúan en una máxima de 30º centígrados y una mínima de 18º. Esto supone que el riesgo para la salud aumenta cuando las temperaturas sobrepasen ambos rangos en la misma jornada.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios