El rector de la UVA remarca que no todas las titulaciones con bajo alumnado están "en peligro"

EUROPA PRESS

Miguel ha puesto el ejemplo de Óptica y Optometría, que cuenta con una treintena de plazas, que es el "número óptimo" para poder "atender perfectamente" a los estudiantes y también porque "las posibilidades de empleo son de esas cifras".

El rector se ha expresado así en el marco de la visita este jueves a las obras de la segunda fase del campus segoviano María Zambrano, junto a la directora general de Universidades, Pilar Garcés; la presidenta de las Cortes regionales, Silvia Clemente; y la alcaldesa de Segovia, Clara Luquero, entre otras autoridades.

Durante esa visita, el rector ha explicado que "hay que acoplar la oferta a la demanda" y por delante hay "dos o tres años" para el análisis, de manera que si en ese plazo se observan ejemplos "ineficientes" se podrán plantear cerrar titulaciones.

Sin embargo, no según el criterio de "cuántos alumnos entran", ya que de haberlo aplicado se habrían eliminado los estudios de Física y Matemáticas, que es un doble grado que admite diez alumnos. De este modo, "no se puede aplicar la eutanasia al primer síntoma de fiebre", ha señalado Daniel Miguel, que ha invitado a "verlo con un poco más de perspectiva".

Por otro lado, el rector de la UVA ha reconocido que el retraso en la configuración de un Gobierno puede tener efectos negativos por la demora que puede suponer en la aprobación de presupuestos. Así, Daniel Miguel ha afirmado que gestionar con un presupuesto prorrogado "es muy difícil", puesto que "siempre surgen cosas nuevas que hay que atender" y que no han sido tenidas en cuenta con los criterios del año anterior.

Igualmente, Miguel ha apostillado que el Gobierno en funciones no ha podido introducir modificaciones legislativas para concretar la evaluación final de Bachillerato o el acceso a la universidad y ha agregado que los estudiantes que ahora empiezan esa etapa educativa "deberían saber cómo va a ser".

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