Accidente avión. Usca destaca el “robusto” sistema de seguridad aérea, pero advierte de una “deficiente” formación


La Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) señaló este jueves que el sistema de seguridad aérea es “robusto” y las barreras de seguridad “funcionan”, si bien opinó que la formación a pilotos y controladores es “deficiente” y “no está adecuada a la realidad”.
Así lo señaló en declaraciones a Servimedia la portavoz de USCA, Susana Romero, quien señaló que la seguridad aérea “sigue siendo un referente” y sus métodos son copiados por otros medios de transporte.
No obstante, matizó que “cuando una norma se relaja se abren pequeñas fisuras que pueden llevar a cuestiones más graves como incidentes o incluso accidentes”, y recordó que controladores y pilotos llevan mucho tiempo advirtiendo de “posibles deficiencias” y animando “constantemente” a invertir en seguridad. “No sólo es tener la mejor tecnología ni el avión más moderno volando”, sino “otras muchas cosas”, como la formación.
Romero indicó que el aspecto de la formación pudo ser una de las causas que influyeron en el accidente de Germanwings, si bien dijo no querer aventurarse a hablar de una “causa-efecto” y abogó por esperar a las conclusiones finales de la comisión de investigación, ya que en los accidentes suceden “muchas cosas”.
Asimismo, tras las declaraciones de la Fiscalía de Marsella en las que se aseguraba que parece que uno de los pilotos "estrelló el avión voluntariamente", Romero dijo entender que “responden a algo serio”. “Estamos muy preocupados, es lo peor que puede haber pasado”, agregó.
En cualquier caso, reclamó una mejora de la formación impartida en España, tanto inicial como continua, al considerar que “no está adecuada a la realidad” y “no es como era antes”, puesto que en la inicial “hay muchas carencias muchas veces”.
“Es imposible que en mucho menos tiempo veas lo que veías antes”, advirtió tras manifestar que “desde que estoy trabajando en 1998 jamás he simulado una emergencia desde que estaba en la escuela”. En su opinión, el actual sistema de formación en España es un “filtro económico” al abonarse hasta 40.000 euros por “cuatro meses escasos” de formación, lo que evidencia que “hay una diferencia significativa” respecto a la formación que se impartía con anterioridad.

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