ACNUR denuncia que muchos sirios en Jordania han caído en la pobreza extrema

Ammán, 14 ene.- El responsable del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Antonio Guterres, advirtió hoy de que un gran número de refugiados sirios en Jordania "está cayendo en la pobreza extrema", lo que aumenta los casos de abandono escolar de los niños y de explotación de las mujeres.

En una rueda de prensa en Ammán, junto al ministro jordano de Asuntos Exteriores, Naser Yudeh, Guterres señaló que esto ocurre "a un ritmo alarmante" y se debe a "la magnitud de la crisis y a la falta de apoyo de la comunidad internacional".

El alto comisionado presentó un informe, realizado por ACNUR e International Relief and Development, que revela que dos tercios de los refugiados sirios en Jordania viven por debajo del nivel de pobreza nacional.

Uno de cada seis hogares de refugiados sirios se encuentra en la pobreza extrema, con menos de 40 dólares por persona por mes para cubrir sus necesidades, según el estudio, que se basa en los datos obtenidos en visitas a domicilio en 2014 a casi 150.000 desplazados que viven fuera de los campamentos establecidos.

Guterres dijo que debido al escaso apoyo internacional, "las familias optan por estrategias de supervivencia cada vez más drásticas".

"Más niños abandonan la escuela para trabajar y más mujeres están en riesgo de explotación, incluida la sexual", agregó.

Además, pidió un "enorme apoyo" para Jordania, que acoge a al menos 620.000 refugiados sirios, según el registro de ACNUR, con el fin de frenar el "rápido deterioro en la condiciones de vida" de los desplazados.

"La generosidad del pueblo y el Gobierno de Jordania tiene que ir acompañada de un gran apoyo de la comunidad internacional a los propios refugiados y a la población local que los acoge", subrayó Guterres.

De los 620.000 sirios desplazados a Jordania, una cifra que las autoridades elevan a más de un millón, el 84% vive fuera de los campos de refugiados establecidos, según el responsable de ACNUR.

Guterres expresó también su solidaridad con los refugiados que sufren el impacto de la tormenta de nieve Huda, que es "todavía visible y ha supuesto una mayor presión sobre sus condiciones de vida ya terribles".

Por su parte, el jefe de la diplomacia jordana insistió en que hay "una necesidad urgente de una respuesta internacional más fuerte que permita a Jordania acoger a los refugiados sirios".

Según las últimas cifras de ACNUR, hay más de 3 millones de refugiados sirios, que han huido de la guerra principalmente a países vecinos como Líbano, Turquía, Jordania e Irak.