Cantabria pierde a uno de sus grandes valedores, pero guardará su legado

  • La muerte del empresario Emilio Botín ha dejado a Cantabria sin uno de sus principales valedores y referentes, el banquero que llevó por todo el mundo el nombre de Santander, la capital de la comunidad, y que deja para la región un vasto e inacabado legado como mecenas.

Magdalena Vallejo

Santander, 10 sep.- La muerte del empresario Emilio Botín ha dejado a Cantabria sin uno de sus principales valedores y referentes, el banquero que llevó por todo el mundo el nombre de Santander, la capital de la comunidad, y que deja para la región un vasto e inacabado legado como mecenas.

El hasta ahora presidente del Banco Santander y de la Fundación Botín ha fallecido este miércoles, de un infarto, en su domicilio de la localidad madrileña de Somosaguas.

Su repentina muerte ha sorprendido al mundo de la banca, de la cultura, del deporte, de la política... y prácticamente a todos los sectores de la sociedad española, que han lamentado su pérdida.

Pero sobre todo ha conmocionado a Cantabria, la tierra que le vio nacer el 1 de octubre de 1934, y la más beneficiada de su labor de mecenazgo.

La pérdida del banquero ha teñido de luto la región justo cuando se engalanaba para la jornada inaugural del Mundial de Vela Santander 2014, al que Botín tenía previsto asistir.

En los próximos días se esperaba también su presencia en Cantabria con motivo de la junta extraordinaria de accionistas convocada para el lunes para aprobar la ampliación de capital que debe afrontar el Santander para adquirir los activos de la filial brasileña.

Botín ya no presidirá esa reunión: Lo hará, si se mantiene la convocatoria, su hija Ana Patricia Botín, nombrada ya nueva presidenta de la entidad.

El banquero tampoco podrá ver terminado su último gran legado a los cántabros, el Centro de Arte Botín que se construye junto a la bahía santanderina.

La complejidad de la obra ha hecho que el edificio, diseñado por el arquitecto italiano Renzo Piano, no se haya terminado para este verano, como esperaba inicialmente Botín.

Este centro será la memoria viva del banquero que convirtió al Santander en la entidad financiera más importante de España, de la eurozona y una de los más relevantes del mundo, pero no olvidó sus orígenes, lo que le llevó a mantener siempre la sede social en la capital cántabra.

También será recordado por su contribución al impulso del actual Museo de Altamira y su neocueva, por sus donaciones al Hospital Universitario Marqués de Valdecilla y por su apoyo a las actividades culturales y sociales en la región a través de la Fundación Botín.

Cantabria llora ahora su pérdida y muestra su dolor con las banderas ondeando a media asta. El Gobierno regional ha declarado este miércoles jornada de luto oficial.

El Reglamento de Honores y Distinciones sólo fija este tipo de declaraciones para personalidades que hayan sido distinguidas o condecoradas por la región.

Y no fue el caso de Botín, que nunca quiso reconocimientos personales y, cuando recogió en 2007 las Medallas de Oro de Santander y Cantabria, fue en nombre del banco y la fundación que presidía.

Pese a ello, el presidente cántabro, Ignacio Diego, ha considerado que una persona con la "relevancia" que Botín ha tenido para Cantabria merece esta "muestra de sentimiento público".

El entierro del empresario será este jueves, en el panteón familiar en la finca de los Botín en Puente San Miguel (Reocín). Se hará, por deseo de la familia, en la "más estricta intimidad".

También será privado el velatorio que se abrirá en "El Promontorio", la antigua residencia familiar en Santander. Y ya el sábado, la Catedral de Santander acogerá el funeral por su descanso.

Tras conocerse la muerte del banquero, el Rey Felipe VI ha elogiado su trayectoria y su papel "protagonista" en la transformación del Santander en un banco global.

El presidente regional, por su parte, ha lamentado que la región ha perdido a uno de sus "grandes valedores", uno de los cántabros "más importantes de todos los tiempos", que demostró un "compromiso inquebrantable con su tierra".

En la misma línea se ha expresado el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, quien ha afirmado que la capital cántabra "queda huérfana de una de las grandes figuras de su historia", que ha contribuido a "engrandecer" la ciudad y a que sea conocida en todo el mundo.

Y el presidente del Parlamento cántabro, José Antonio Cagigas, lo ha recordado como "un gran financiero y una gran persona", que hizo mucho por Santander y por Cantabria y trabajó por la "marca España". EFE

mv/pss

Mostrar comentarios