Centro proinmigrante de Chicago aplaude protección indocumentados en cárceles

Chicago (EE.UU.), 17 may.- El Centro Nacional de Justicia Inmigrante de Chicago aplaudió hoy la decisión del Departamento de Justicia de incluir a los indocumentados en custodia de Inmigración en las protecciones que confiere la Ley de Eliminación de Violaciones en las Cárceles (PREA, por su sigla en inglés).

En una declaración, el centro dijo que era "cautamente optimista" ante la idea de que las nuevas normas mejorarán la seguridad de los indocumentados, y exhortó al Gobierno a vigilar su implementación en "tiempo y forma" a cargo del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).

El Departamento de Justicia anunció hoy una serie de normas definitivas para prevenir el abuso sexual de jóvenes y adultos en las cárceles del país y resguardar la seguridad de los reos, incluyendo a inmigrantes.

"Las normas que establecemos hoy reflejan el hecho de que los delitos de ataques sexuales cometidos al interior de nuestras instalaciones carcelarias pueden tener consecuencias devastadoras, tanto para las víctimas como para las comunidades, más allá de las cárceles", dijo en un comunicado el fiscal general de EE.UU., Eric Holder.

La directora ejecutiva del Centro Nacional de Justicia Inmigrante de Chicago, Mary Meg McCarthy, celebró que el Gobierno haya "reconocido finalmente que los inmigrantes detenidos deben ser protegidos contra la violencia sexual en las cárceles mientras se encuentran en custodia de Inmigración".

"Desearíamos que las regulaciones se apliquen inmediatamente en los establecimientos de detención de inmigrantes, pero el DHS todavía tiene un año más para implementar una ley que está vigente desde hace casi una década", dijo.

Según la directora, algunas de las disposiciones anunciadas "evidencian el compromiso del presidente (Barack) Obama con la protección de los inmigrantes contra abusos, particularmente los que son vulnerables debido a su orientación o identidad sexual".

El centro señaló en su declaración que la propuesta inicial del Departamento de Justicia en 2011 excluía la aplicación de las regulaciones de la ley a las instalaciones a cargo del DHS, lo que motivó una vigorosa campaña de los grupos proinmigrantes y defensores de los prisioneros.

La respuesta del secretario de justicia, Eric Holder, fue recomendar en marzo pasado que la protección de la PREA se ampliara al sistema de detención de Inmigración.

El centro afirma que el anuncio del Gobierno se hizo en momentos que crecen las evidencias de violencia sexual contra indocumentados detenidos.

En 2011 el centro presentó una denuncia colectiva de violación de los derechos civiles de 17 inmigrantes pertenecientes a minorías sexuales, que fueron víctimas de abusos mientras estaban en custodia del DHS.